Economía/Empresas.- Reckitt ofrece indemnizaciones de 60 días con tope de 42 meses y prejubilaciones a 51 años

Actualizado: martes, 12 diciembre 2006 21:07

Dice que si el pronunciamiento de Trabajo es negativo, aplicará el cierre patronal y unas indemnizaciones de 20 días

BILBAO, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

Reckitt Benckiser presentó hoy una oferta que plantea unas indemnizaciones de 60 días por año trabajado con un tope de 42 mensualidades y un mínimo de 36.000 euros, prejubilaciones a los empleados con más de 51 años y compromisos de recolocación.

La empresa solicitó el pronunciamento de la plantilla sobre esta propuesta antes de las 24 horas de mañana, plazo en el que dará por concluido el periodo para negociar el ERE y esperará al pronunciamiento del Departamento de Trabajo. Añadió que si este pronunciamiento es negativo, aplicará el cierre patronal y se ajustará a unas indemnizaciones de 20 años por día trabajado.

En un comunicado, la dirección señaló que los trabajadores presentaron hoy una "propuesta desproporcionada" y que, por su parte, ellos, plantearon otra oferta al comité.

La propuesta de la multinacional consiste en ofrecer indemnizaciones por rescisión de la relación laboral de 60 días de salario por cada año trabajado, con un tope de 42 mensualidades y un mínimo de 36.000 euros, prejubilaciones para los trabajadores con más de 51 años, cumplidos antes del 1 de enero de 2007 y un compromiso de recolocación para el 100% de la plantilla, con excepción de los trabajadores que opten por las prejubilaciones.

El plan de recolocaciones propuesto contempla dos fórmulas. La primera consiste en la recolocación específica en proyectos industriales que se instalen en las actuales instalaciones de Güeñes o en su entorno cercano.

Según explicó, los trabajadores que se acojan a esta opción mantendrían una situación de suspensión de su relación laboral con Reckitt hasta la fecha de la nueva contratación con las nuevas compañías, así como una indemnización entre 20 y 45 días de salario por cada año trabajado según su situación de pérdida de condiciones laborales.

Además, contarían con un complemento salarial que garantice la percepción del 100% de su salario neto actual durante el periodo que dure la suspensión de su relación laboral, hasta un máximo de 18 meses, tras los cuales, si no se ha producido la contratación, se aplicarían una serie de garantías adicionales de carácter indemnizatorio.

La segunda fórmula de recolocación consiste en desarrollar un plan de prospección y búsqueda de empleo en empresas del entorno para el resto de los trabajadores, que recibirían una indemnización por la rescisión de la relación laboral de 60 días de salario por cada año trabajado, con un tope de 42 mensualidades, con un mínimo de 36.000 euros.

La compañía señaló que, desde el anuncio del cierre de la fábrica, ha estado desarrollando contactos y conversaciones con posibles inversores, por lo que actualmente "existen ya posibilidades reales de aplicar el plan de recolocaciones específicas". Asimismo, precisó que durante estos tres meses, especialistas en "outplacement" han estado trabajando para disponer, "a fecha de hoy, de propuestas concretas de empleo en otras empresas, que con gran probabilidad podrán ampliarse a corto plazo".

Reckitt afirmó que se trata de "la mejor propuesta que puede realizar la empresa" teniendo en cuenta las circunstancias de la fábrica, por lo que ha solicitado al comité de empresa un pronunciamiento de la plantilla respecto a su contenido antes de las 24 horas de mañana.

No obstante, adelantó que, sea cual sea el resultado, darán por concluido el periodo de consultas para negociar el ERE y quedará a la espera de la decisión del Departamento de Trabajo del Gobierno vasco. La empresa indicó que, en caso de que la plantilla rechace la oferta, "ésta quedaría sin efecto".

Asimismo, manifestó que, si el pronunciamiento del Gobierno es negativo, la empresa iniciará los trámites necesarios para "proteger" sus intereses económicos después de tres meses de "fuertes pérdidas derivadas de una producción bajo mínimos".

En este caso, según precisó, la empresa se acogerá a los términos que establece la legislación vigente que contempla una indemnización de 20 días de salario por cada año trabajado y aplicará el cierre patronal "como medida para proteger sus intereses debido al boicot organizado por una minoría de los trabajadores".

Reckitt Benckiser afirmó que, desde que se anunció el cierre de la planta de Güeñes, se ha "volcado" en elaborar propuestas que permitan "minimizar el impacto que esta medida tiene para los trabajadores y para el tejido industrial de la zona".

"Durante estos tres meses ha trabajado en la búsqueda de proyectos industriales y posibilidades de empleo que favorezcan la recolocación de los trabajadores y en diseñar un plan razonable de indemnizaciones y prejubilaciones que ofrezca una compensación adecuada a la plantilla de la fábrica. Todo ello se refleja en la propuesta que hoy se presenta, por lo que confía en que la plantilla la valore positivamente", concluyó.