Economía/Empresas.- Sindicatos dicen que Xunta ve difícil que Calvo siga en manos gallegas

Actualizado: martes, 17 octubre 2006 20:39

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos advirtieron hoy de que la conselleira de Pesca, Carmen Gallego, considera difícil que grupos gallegos puedan comprar Calvo dada la envergadura económica y financiera de esta operación y se decanta por la posibilidad de que sea un grupo alimentario nacional el que pueda adquirir la participación mayoritaria de la conservera que pone a la venta la familia fundadora.

Las centrales también reclaman a la Xunta que actúe de mediadora para que la familia Calvo, incluso su tercera generación, se quede con algo de su actual participación, que es del 77,8%, en compañía de otros grupos gallegos. Esta empresa tiene dos plantas en Galicia, en Carballo, donde nació en 1940, y en Esteiro (Muros).

Por su parte, la Consellería de Pesca manifestó que tanto este departamento como el de Economía trabajan para conseguir mantener el empleo y la capacidad productiva de Calvo en Galicia y que la mejor opción de compra vendría de "empresas comunitarias" para evitar la entrada de una firma de capital asiático, que considera que podría ser "perjudicial para los intereses del conjunto de la industria conservera gallega".

Así, Francisco Villar, de CC OO, expresó su "preocupación" por el hecho de que Pesca "esté trabajando más de cara a ofertas de fuera de Galicia, que pueden ser incluso ajenas al sector conservero". Explicó que Calvo tiene "muchas industrias productivas y barcos" y añadió que "una gran multinacional o grupo de capital riesgo puede poner en peligro los puestos de trabajo y el conjunto del sector".

El dirigente sindical insistió en que la conselleira no pudo garantizar que Calvo quede en manos gallegas y recordó que la familia que fundó esta conservera "dice que mirará su interés particular" y venderá su participación al mejor postor.

INFLUENCIA EN EL SECTOR

Xosé Fernández Piñeiro, de la CIG, coincidió en que Pesca "no garantiza" que el capital de Calvo "sea gallego" debido "a la complejidad del grupo" y considera que es algo "preocupante no sólo para los trabajadores de este grupo, sino que puede influir en todo el sector".

En su opinión, la Xunta "tiene que propiciar que Calvo tenga capital gallego" y no se debe descartar "que una parte de la familia pueda entrar en un nuevo proyecto industrial". "Es una operación complejo y el comprador debe conocer el funcionamiento de estas industrias", indicó.

Además, señaló que la Administración autonómica "en breve tiempo debe ser taxativa" y anunciar "que la Xunta será un adversario importante frente a aquel comprador que no vayan a mantener la capacidad productiva". "Todavía tiene crédito la consellería para profundizar en contactos", añadió.

Por su parte, Luis Rey, de UGT, también expresó "una cierta preocupación" por no garantizarse que quede Calvo siga "en manos gallegas" y por la posibilidad de que la empresa compradora "no tenga que ver con el sector conservera".

"Lo que se debe preservar es la capacidad productiva. La Xunta debería mediar para que la familia Calvo se quedase una parte del accionariado, incluso la tercera generación", demandó.

MANTENER CAPACIDAD PRODUCTIVA

Mario Díaz, de CUT, explicó que lo que le preocupa es "el número de empleos que están en juego", pues "deben mantenerse todos", y, luego, si el comprador puede ser gallego, mejor. Recordó que está prevista una movilización en Carballo para demandar el mantenimiento de la capacidad productiva, que podría celebrarse un sábado de la primera quincena de noviembre.

La conselleira de Pesca también les indicó a las centrales sindicales que se debe mantener prudencia en las manifestaciones públicas, ya que hay que respetar la decisión que finalmente tome el grupo empresarial.

En este sentido, recordó que el "Gobierno gallego no puede intervenir directamente en esta operación, pero sí crear las condiciones idóneas para que, de efectuarse la venta, se mantenga la capacidad productiva y el empleo en Galicia".

Finalmente, Carmen Gallego se comprometió a mantener informados a los sindicatos convocándolos a una nueva reunión cuando existan novedades en el proceso.