MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
Tras 38 años de actividad, la central nuclear 'José Cabrera' de Almonacid de Zorita (Guadalajara), la más antigua de España, parará sus máquinas a las 23.30 de esta noche. Este cierre, reclamado desde hace años, fue muy celebrado por los ecologistas, que exigieron que el resto de centrales de nuestro país corrieran la misma suerte. En esta misma línea, el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares -que también acudió al acto de cierre simbólico- reclamó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que cumpla sus compromisos y presente un calendario de cierre de nucleares al tiempo que consideró la Central de Zorita como un centro fuera del "periodo de vida útil, insegura, inmadura y por lo tanto peligrosa".
Zorita pasará a convertirse en una planta de ciclo combinado con una capacidad de generación de 800 megavatios (MW), lo que supondrá una inversión total de 253 millones de euros. Esta central contaba hasta hoy con 125 empleados, de los que unos 70 se mantendrán en la nueva planta, mientras que los 50 trabajadores restantes se trasladarán a otros centros de producción diferentes con que cuenta la propietaria del centro, Unión Fenosa.
El cierre progresivo comienza a las 17.30 horas, con una bajada de generación desde los 122 MW a un ritmo de 20 MW cada hora hasta las 23.30, con lo que la central irá reduciendo su carga hasta realizar la desconexión de la red eléctrica para proceder, inmediatamente después, a la parada del reactor. La central, que durante los tres años posteriores al parón seguirá siendo propiedad de Unión Fenosa, deberá comenzar un complejo proceso de desmantelamiento que no concluirá hasta 2015 y costará 170 millones de euros.
BRINDIS POR EL CIERRE
La plataforma 'Zorita ni un año más', integrada por partidos políticos como PSOE, IU, Tierra Comunera, organizaciones ecologistas, sindicales, vecinales y culturales brindaron "con cava español", elaborado en Cataluña, para celebrar la clausura de la central nuclear más antigua de España. Si bien todas las organizaciones se mostraron satisfechas y alegres con el cierre de Zorita, no faltaron las voces críticas con la política energética del Gobierno.
Así, Gaspar Llamazares recordó que el Ejecutivo central tiene el compromiso, y debe cumplirlo, de presentar un calendario pactado de cierre de las centrales nucleares en un periodo, por ejemplo, hasta 2020. A su juicio, ese calendario debe comenzar hoy con Zorita, más tarde con Garoña y debe continuar con el cierre de todas las centrales nucleares de España. Llamazares aseguró que ese es el camino que se está siguiendo a nivel internacional, pese a las presiones de los 'lobbys pronucleares', e insistió en que IU están convencidos de que el Gobierno, las fuerzas sociales, el movimiento ecologista y la izquierda apoyará este camino "porque es el único posible".
El director de Campañas de Greenpeace, Mario Rodríguez, destacó igualmente el "momento de celebración", aunque criticó la "ambigüedad" del Gobierno en materia nuclear y exigió a Zapatero que cumpla su compromiso de elaborar un calendario de cierre para que se inicie la "caída en dominó del resto de las centrales". Además desde la asociación ecologista denunciaron el "planteamiento falso" que se ha instalado en la sociedad acerca de que la energía nuclear pueda sustituir al petróleo como fuente principal de energía.
Así, explicaron que el uranio no sólo "tiene un periodo de vida menor que el del petróleo y en unas décadas va a dejar de ser una fuente de combustible viable económicamente", sino que "la energía nuclear nunca va a ser sustituta del petróleo y la dependencia de España sería igual o mayor que con los combustibles fósiles, como el petróleo o el gas, porque no tenemos uranio en nuestro territorio".
