MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
El consejo de administración de la Comisión Nacional de Energía (CNE) no pone trabas al borrador de real decreto del Ministerio de Industria en el que se contempla la posibilidad de revisar de forma excepcional la parte de los peajes de la Tarifa de Último Recurso (TUR), pero recomienda que esta medida se adopte como máximo con periodicidad trimestral.
En un informe de análisis del borrador de Industria aprobado ayer, la CNE valora positivamente la propuesta y señala la conveniencia de que la revisión anual de las tarifas de acceso coincida con la revisión de los componentes de costes del propio acceso. Además, propone que se limiten las circunstancias que puedan dar objeto a la revisión excepcional.
Junto a esto, recomienda al departamento dirigido por Miguel Sebastián que la norma establezca "expresamente" que la revisión excepcional de los peajes conllevará también una revisión del conjunto de la TUR, lo que permitirá garantizar la aditividad de la tarifa, esto es, el principio de que el importe que paga el consumidor recoge todos los costes de la electricidad.
El borrador de Industria prevé la revisión obligatoria de los peajes de acceso al menos una vez al año, así como la posibilidad de realizar revisiones de carácter "potestativo" cuando haya "circunstancias especiales" que lo aconsejen.
Entre estas circunstancias figuran desajustes temporales en las liquidaciones y cambios regulatorios que afecten a los costes del sistema. Además, el borrador de decreto da por hecho que hasta el 1 de enero de 2013 habrá revisiones semestrales de la TUR.
EXPEDIENTES INFORMATIVOS.
Por otro lado, la CNE acordó ayer la apertura de varios expedientes informativos relacionados con el servicio de las comercializadoras de electricidad a los clientes.
En uno de ellos, dice adoptar esta decisión después de haber detectado que algunas empresas están cobrando un "servicio de reloj" a los consumidores con contratos de discriminación horaria.
También investigará el cobro a los consumidores de un "derecho de enganche" por parte de las empresas distribuidoras como parte de la sustitución de los contadores de la luz.
AVAL PARA POSIBLES MOROSOS.
Junto a esto, el organismo presidido por María Teresa Costa investiga en otros dos expedientes los problemas de muchos clientes para contratar el suministro en el mercado libre.
En junio había 205.506 clientes que dejaron de tener derecho a la tarifa regulada y que, sin embargo, no han podido contratar todavía un suministro en el mercado libre. En febrero, la cifra ascendía a 354.636 usuarios.
Para solucionar el problema, la CNE propone una "reestructuración y actualización" de toda la normativa vigente, que se encuentra demasiado "dispersa", así como una simplificación de los "rígidos" concursos de suministro de las administraciones públicas.
También propone que se pidan "avales en el mercado libre a clientes de alto riesgo comercial por morosidad", aunque pide que no se incluya en esta categoría a las administraciones públicas, ya que ofrecen "suficientes garantías de cobro".
