La compra de Repsol podría cambiar el mapa energético español

Actualizado: domingo, 23 noviembre 2008 16:30


MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -

La hipotética toma de control de Repsol YPF por parte de un nuevo socio como Lukoil y la pérdida de peso de los actuales accionistas de control provocaría no sólo un vuelco en el sector de los hidrocarburos, sino un cambio en todo el mapa energético español, según expertos consultados por Europa Press.

Al margen de la incertidumbre acerca de si será Lukoil o cualquier otro grupo extranjero el que compre el 20% de Sacyr en Repsol, la operación afectará al proceso de consolidación del sector eléctrico, en el que la petrolera se encuentra directamente implicada, indican los expertos.

De hecho, el juego de participaciones en el sector energético convierte a la petrolera en una pieza clave y concede a su principal accionista una amplia cuota de poder en Gas Natural y, con ello, en Unión Fenosa cuando culmine la OPA sobre la eléctrica. De esta forma, controlar Repsol equivale a ponerse en primera línea en los negocios del petróleo, el gas y la electricidad.

Repsol tiene una participación del 30% en Gas Natural y ha convertido a la gasista catalana en uno de sus ejes dentro de su actual plan estratégico. Hasta tal punto es su compromiso, que se ha implicado financieramente en la compra de Unión Fenosa por parte del grupo presidido por Salvador Gabarró.

La petrolera anunció que acudirá a la ampliación de capital por 3.500 millones que realizará en abril de 2009 Gas Natural para absorber Unión Fenosa y ha elevado su deuda en los nueve primeros meses del año en 517 millones de euros para ayudar a sufragar la compra de un 9,9% de la eléctrica.

Más aun, cuando la gasista decidió comprar Unión Fenosa a 18,33 euros por acción y endeudarse por 19.000 millones de euros, el acuerdo requirió la complicidad de Repsol y Criteria, que celebraron sendas reuniones extraordinarias de sus consejos de administración para dar el visto bueno a la operación.

Si Sacyr y Criteria abandonan la petrolera, la nueva dirección tendrá que hacerse cargo de las complejas alianzas tejidas en los últimos años por sus predecesores. La condición de extranjero del nuevo socio podría si cabe complicar el trabajo y enrarecer los múltiples movimientos de Repsol para liderar un sector tan estratégico y sensible como el de la energía, señalan los expertos.

EL PAPEL DE 'LA CAIXA'

Otro de los aspectos transformadores del mapa energético sería la hipotética decisión de 'La Caixa' de desprenderse de todo o parte del 14% que, entre Criteria y la sociedad Repinves, posee en Repsol.

La caja catalana se había convertido en uno de los elementos vertebradores de la alianza entre Repsol y Gas Natural, en la que controla un 33%. Su director general, Juan María Nin, es junto a Antonio Brufau la única persona que ostenta los cargos de consejero de ambas empresas.

La hipotética salida de 'La Caixa' de Repsol convertiría a Gas Natural en la única gran apuesta energética de la caja catalana y pondría fin al juego de sociedades capaces de pivotar entre distintos grupos del sector. ACS, al desprenderse de Unión Fenosa y quedarse sólo con Iberdrola, era el penúltimo grupo en disfrutar de estas dobles alianzas.