Economía/Energía.- Las familias pagarán hasta un 80% más con la nueva tarifa nocturna, según UCE

Actualizado: martes, 20 mayo 2008 15:26

Los consumidores calculan que las empresas tendrán ingresos "ilícitos" de 150 millones y dicen que combatirán la norma en los tribunales

MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -

La desaparición de la tarifa nocturna obligará a cerca de un millón de familias acogidas a esta modalidad a pagar entre un 25% y un 80% más en su factura eléctrica, según el portavoz de la Unión de Consumidores de España, Dacio Alonso, quien calificó de "inconstitucional" los cambios aplicados por el Gobierno.

En una rueda de prensa, Alonso consideró que el cambio en esta tarifa es "inconstitucional" y que permitirá a las empresas, en "connivencia con el Gobierno", ingresar de forma "ilícita" cerca de 150 millones de euros, al tiempo que los consumidores desembolsan 140 euros más en su factura de la luz al año.

Por este motivo, UCE exige al Ministerio de Industria la retirada del real decreto 1634/2006, que entrará en vigor a partir del 1 de julio con los cambios en la tarifa nocturna, y se compromete a adoptar "todas las acciones judiciales" necesarias para que se retire la norma.

La UCE ya ha denunciado el texto ante el Defensor de Pueblo y ante instituciones similares de carácter autonómico. Alonso explicó que esta iniciativa ha sido admitida a trámite y mostró su confianza en que el Defensor del Pueblo pida al Gobierno la paralización del decreto.

Hasta el momento, los usuarios de tarifa nocturna se beneficiaban de un descuento del 55% en las 'horas valle' --entre las 23 y las 7 horas-- y sufrían una penalización del 3% durante el resto del día, considerado 'hora punta'.

Con el nuevo sistema de discriminación horaria, se amplía de ocho a catorce el número de horas 'valle' y se reduce ligeramente, al 47%, la bonificación por consumir en ese periodo, pero se obliga al usuario a contratar la máxima potencia demandada y se le aplican penalizaciones del 35% si lo hace en horas 'punta'.

Estos dos últimos aspectos son a juicio de Alonso los factores que encarecen considerablemente la factura de los usuarios y suponen un "cambio en las reglas de juego", así como un "abuso manifiesto" y un "atropello" por parte del Ministerio de Industria.

Por otro lado, la UCE denuncia la "falta de transparencia" del Gobierno en este proceso, ya que no ha realizado campañas para informar a los consumidores del cambio de la tarifa y ha actuado en "complicidad" con las eléctricas.

Las empresas, señaló Alonso, apenas han informado a los usuarios de los cambios en sus contratos y, si lo han hecho, ha sido a través de cartas en las que se empleaba un lenguaje "farragoso", afirman los consumidores.

"INCONSTITUCIONALIDAD".

"Que los consumidores tengan confianza en que vamos a llevar todo esto a los tribunales", indicó el portavoz de la UCE, quien dijo que su organización cuenta con "solvencia jurídica" y con elementos de jurisprudencia suficientes para evitar que prospere el decreto.

UCE entiende que, trece años después de potenciar y apoyar la tarifa nocturna, el decreto tiene carácter retroactivo y vulnera el Artículo 9.3 de la Constitución, en el que se garantiza la seguridad jurídica frente a la arbitrariedad de los poderes públicos.

Al "cambiar las reglas del juego", Industria genera inseguridad jurídica y compromete inversiones de ciudadados en sistemas de calefacción como los generadores que fueron promovidas por los propios poderes públicos, indicó Alonso.

RECOMENDACIONES A LOS USUARIOS.

UCE recomienda a los consumidores que no se dirijan a las eléctricas para cambiar sus actuales contratos de tarifa nocturna, ya que de esta forma las modificaciones que se apliquen podrán considerarse alteraciones unilaterales de los términos del acuerdo.

Las organizaciones de consumidores vienen denunciando desde hace meses el fuerte encarecimiento de la tarifa nocturna, lo que hizo que a finales de abril la Comisión Nacional de la Energía (CNE) decidiera trasladar a Industria las reclamaciones recibidas por parte de estas sociaciones.

Las nuevas altas en el sistema eléctrico se acogen desde el 1 de enero a la tarifa con discriminación horaria, al tiempo que los anteriores usuarios, que tenían contratada la tarifa 2.0.