MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Unión de Empresas Siderúrgicas (Unesid) mostró hoy su apoyo a la renovación de la autorización de la central burgalesa de Santa María de Garoña, pero pidó que "la reducción de costes" que procura la planta se traslade a los precios y no repercuta sólo en las compañías eléctricas.
"Parece obvio exigir que la reducción de costes correspondiente no se quede en los márgenes de las empresas eléctricas", sino que "la reducción debe trasladarse a los precios", afirmó el presidente de Unesid, Gonzalo Urquijo, durante el almuerzo anual de la patronal siderúrgica, que hoy celebró su junta general.
En su dircurso, Urquijo se mostró además a "favor tanto de la prórroga de la vida útil" de las centrales nucleares como del aumento del peso de esta fuente de energía en el 'mix' de generación eléctrica.
