Enagás pide un "papel importante" para el gas en la descarbonización para que el proceso no sea "más caro"

El presidente de Enagás, Antonio Llardén
ENAGÁS - Archivo
Publicado: miércoles, 23 mayo 2018 14:19

MADRID, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Enagás, Antonio Llardén, ha pedido "un papel importante" para el gas natural en la descarbonización de la economía, ya que si no es así será más complicado alcanzar los objetivos y "mucho más caro".

En su participación en la jornada 'La cita frente al cambio climático 2018' organizada por Sedigás, Llardén consideró que en esa transición energética la electrificación "debe ir acompañada de otras soluciones complementarias", como el gas natural. "Confundimos descarbonización con la simplificación de que todo va a ser eléctrico", añadió.

A este respecto, indicó que una gran parte del consumo de gas natural está destinado a la industria y, en este caso, no podrá ser sustituido por "la simple electrificación". "Ahí, el gas va a jugar un papel importante", dijo.

Además, Llardén, que consideró que el CO2 tendrá dentro de poco una señal de precio que todavía no tiene, afirmó que el gas natural puede ayudar a disminuir las emisiones de los sectores eléctrico, transporte e industria "de una manera muy significativa".

Por eso, el presidente de Enagás, que aseguró que la transición energética "es imparable", subrayó que el gas natural debe tener su papel en la descarbonización de las economías, ya que "técnicamente y en coste lo puede jugar".

"Vamos a un proceso de descarbonización claro e inevitable, que es positivo y se va a realizar. El objetivo es realizarlo en tiempo, forma y de la manera más económica posible", dijo al respecto.

NEUTRALIDAD TECNOLÓGICA Y "RENOVABLES NO ELÉCTRICAS".

En este sentido, Llardén pidió que el proceso de la descarbonización tenga "una cierta neutralidad tecnológica". "Hay que marcar unos objetivos y dejar que se usen los medios, no marcar también los medios", señaló.

Así, apostó por las soluciones "muy económicas y eficientes" que puede dar el gas con "las renovables no eléctricas", como el biogás, una realidad en otros países de Europa con 459 puntos de conexión a la red, pero que solo cuenta con uno en España, o el hidrógeno, una tecnológica que además de ser utilizada como almacenamiento puede aprovechar las infraestructuras actualmente existentes "sin necesidad de hacer grandes reformas".