Las obras del gasoducto Península-Baleares comenzarán en cuatro semanas en Ibiza

Actualizado: domingo, 7 octubre 2007 21:09


PALMA DE MALLORCA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Enagás, Antonio Llardén, anunció que los trabajos del gasoducto Península-Baleares comenzarán en noviembre, dentro de cuatro semanas, con la construcción del punto de aterraje, o 'land fall', en Sant Antoni de Portmany (Ibiza), donde emergerá en un futuro el tubo procedente de Dènia (Alicante) y desde donde partirá la conexión hacia Mallorca.

En declaraciones a los medios previas a la reunión mantenida con el presidente del Govern balear, Francesc Antich, y la consellera de Comercio, Industria y Energía, Francesca Vives, Llardén explicó que la caseta, ubicada en Punta de Cala Gració, albergará la estación de medida de paso de gas desde la que partirá un canal de Gesa Endesa hasta la central eléctrica de ciclo combinado de Ibiza.

Los trabajos de excavación de las microtuneladoras en la Pitiusa se interrumpirá en mayo del próximo año para no interferir en la temporada turística. Después de esta primera fase, en octubre de 2008, se iniciará la construcción de estas mismas instalaciones en Sant Joan de Déu (Mallorca), que servirán para llevar el gas natural hasta las centrales de Cas Tresorer y Son Reus.

Según dijo el presidente de Enagás, estas obras tienen un impacto visual y ambiental mínimo, ya que todos los trabajos son subterráneos, salvo la construcción de la caseta. También en octubre de 2008, empezará la operación de lanzamiento del tubo al fondo marino mediante un barco que irá ensamblando cada pieza de 12 metros de diámetro con la siguiente, construyendo así todo el trazado.

Llardén se mostró "muy satisfecho" por la colaboración obtenida de "todas las instituciones afectadas" y recordó que gracias a esta obra, Baleares verá asegurado su suministro energético y dispondrá de unas infraestructuras de probada seguridad, al margen de los beneficios medioambientales que supondrá sustituir combustibles más sucios, como el fuel-oil y el carbón, por el gas natural, mucho menos contaminante.

Asimismo, confirmó que la fecha prevista para el inicio del suministro es el 1 de julio de 2009. Los casi 490 millones de presupuesto del proyecto global serán cargados a los fondos del Plan Nacional de Infraestructuras y repercutidos en las tarifas de todos los consumidores españoles.

Los 268 kilómetros de gasoducto partirán del municipio alicantino de Dènia y tras 123 kilómetros de tubo sumergido a una profundidad máxima de 997 metros aparecerá en la Punta de Cala Gració, en Sant Antoni de Portmany (Ibiza). Desde la Pitiusa mayor, partirá otro tramo de 145 kilómetros hasta San Juan de Dios, en Palma de Mallorca.

La presión del gas en el punto de llegada a Palma será de 80 bares, el doble de lo que necesitan las centrales energéticas para producir electricidad, para lo que es necesario que parta de Denia con una presión de 140 bares. Una estación de compresión en el punto de partida garantizará estas medidas y permitirá, además, incrementar la presión en el futuro hasta los 240 bares, lo que aumentaría en un 50 por ciento el caudal de gas y, en consecuencia, la capacidad de suministro.

Las previsiones de demanda de gas en el archipiélago durante los próximos años indican que, en 2011, el consumo de las islas será de 1,5 bcm (miles de millones de metros cúbicos) anuales de gas. El gasoducto proyectado estará preparado para dar cobertura a un consumo de 4 bcm, e incluso de 6 bcm con el citado aumento de presión en origen.

Las 22.500 piezas de tubo fabricadas en acero resistente, almacenadas en la provincia de Albacete, tienen 20 pulgadas de diámetro (unos 50 centímetros) y dos centímetros de espesor (el triple de lo habitual para un tubo de alta presión). Posteriormente, en Alicante, serán recubiertas de hormigón con la finalidad de que el peso los mantengan en el fondo y que a la vez sean capaces de soportar la presión del agua y cualquier posible impacto.

CONEXIÓN CON MENORCA

Preguntado por la posible conexión con Menorca, Llardén afirmó que el Ministerio está estudiando este proyecto y que, si atienden al informe favorable elaborado por Enagás, será incluido en el Plan Energético 2007-2016 que prepara el Gobierno y que está previsto que se apruebe antes de diciembre.

En tal caso, la empresa pública elaboraría un proyecto técnico detallado sobre este trazado de unos 40 kilómetros de longitud y que supondría un coste, indicó, de cerca de 200 millones de euros. "Hemos apoyado esta propuesta del Govern balear y el Ministerio lo ve bien", añadió.

Acerca del inicio de los trabajos, Llardén comentó que serán necesarios unos dos años para presentar el proyecto a información pública, obtener la declaración de impacto ambiental favorable y adjudicar las obras, por lo que podría comenzarse coincidiendo con la puesta en marcha del gasoducto Dènia-Ibiza-Mallorca.