Economista jefe de la entidad cree que la subida del Salario Mínimo Interprofesional dificultará creación de empleos en esa franja salarial
BILBAO, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El economista jefe de Caixabank, Enric Fernández, ha afirmado este jueves que la sostenibilidad del sistema de pensiones pasa por retrasar la edad de jubilación y ligarla a la esperanza de vida, aumentar la productividad y eficiencia de la población empleada e incrementar asimismo el porcentaje de personas empleadas en edad de trabajar.
Así lo ha señalado en una conferencia ofrecida en Bilbao sobre las perspectivas económicas a nivel global y local ante un centenar de directivos de la entidad.
Fernández ha indicado que la revalorización de las pensiones públicas "es un tema delicado" donde "la sostenibilidad política es tan importante como la económica y no existe "una solución mágica o única sino un menú de opciones y todas se tendrían que aplicar".
Sin embargo, ha expresado su convencimiento de que el actual modelo del sistema público "es insostenible" a un escenario de tres décadas. Según sus estimaciones, si el ratio actual en España es de dos trabajadores cotizantes por un jubilado que cobra pensión, en 2050 ese ratio se igualará y pasará a ser de "un cotizante por cada pensionista".
Fernández ha abogado por posponer la edad de jubilación y ligarla a la esperanza de vida, así como buscar la manera de reducir la tasa de paro, que en el Estado es "estructural". De igual modo, ha añadido, "una parte de la solución" debe ser "aumentar la productividad y eficiencia de los que trabajan para conseguir hacer la economía más productiva".
IMPACTO ADVERSO SUBIDA SALARIOS
Para el responsable de Caixabank, la economía española está entrando en una fase más madura del ciclo económico vivido en los últimos años, y "suavizará" su ritmo de crecimiento en 2018 y 2019.
En ese punto ha aludido a algunos aspectos del debate reciente, como la subida de los sueldos ligada al crecimiento económico y reclamada tras la superación de la crisis o la reciente decisión de subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 900 euros previsto para 2019.
En su opinión, se trata de elementos que "sospechamos tendrán un impacto sobre la economía del país pero aún no se puede precisar cuánto". Fernández ha señalado que su impacto, cuando se produzca, "dificultará la creación de nuevos empleos en aquellos que están en esa franja de salarios" y también supondrá un efecto "adverso para la competitividad".
En la actual coyuntura, ha proseguido, "si se tuercen las cosas, el Gobierno difícilmente podrá luchar contra la desaceleración desde una política fiscal que no hace ajustes "cuando debe", que impide aplicar una política fiscal "más laxa" que la actual. Como "no estamos ahí", es una "tarea pendiente" aunque hay que ir "cuanto antes" a progresar hacia un "ajuste de las cuentas públicas", ha señalado.
Fernández ha atribuido la desaceleración de la economía española tanto a la desaparición de vientos de cola como los tipos bajos de interés, la subida del precio del petróleo o el efecto rebote tras la crisis, como por el crecimiento más suave de sus principales socios comerciales, que limitará la capacidad de crecimiento de las exportaciones, un sector que ha considerado clave para sostener el superávit de las cuentas públicas porque permite acometer la reducción de la deuda.
EMPLEOS EN RIESGO
El economista jefe de Caixabank ha abordado en su intervención el efecto de la digitalización sobre los empleos. Desde su perspectiva, la digitalización e incorporación de la robotización a la economía y la industria "amplía el abanico de profesiones que pueden verse afectadas por ese cambio tecnológico", que Fernández ha cifrado en el 35% de profesiones que se encuentran en riesgo elevado de desaparecer por la automatización.
En ese punto se ha mostrado convencido de que la automatización y la robotización van a "presionar a la baja los salarios de esas profesiones susteptibles de ser sustituidas", lo que "sin duda va a elevar también el riesgo de incremento de la desigualdad respecto a otros empleos".
Sin embargo, el directivo no cree que esa sustitución se vaya a traducir en un paro masivo en esas profesiones, porque el ejercicio de una profesión son un conjunto de tareas y habrá que considerar aspectos como el coste de incorporar un robot o de mantener una persona y lo que habrá es que cambiar la definición de determinadas profesiones".
Respecto a la situación y riesgos actuales para la economía española, Enric Fernández ha citado el déficit y el nivel de deuda pública "demasiado altos" como "las asignaturas pendientes".
En ese sentido ha lamentado que los años de crecimiento se debían haber aprovechado para "contribuir a poner las cuentas públicas en una posición de menor vulnerabilidad para evitar que la economía española se convierta en un foco de desconfianza para los inversores".
COYUNTURA MUNDIAL
En cuanto a la situación y posible evolución de la economía mundial, el economista de la entidad catalana ha señalado que en 2028 se vivirá "una ligera desaceleración respecto a 2017 pero ha mostrado su convencimiento de que "no va a ir a más y la situación económica no va a continuar empeorando porque estamos cerca de una estabilización dentro de unos niveles de expansión razonablemente buenos".
A juicio de Fernández, el principal riesgo al que se enfrentan las economías mundiales es el auge de los populismos y la aplicación de medidas en esa línea desde algunos gobiernos tanto europeos como de otros continentes porque pueden "frenar las bases de la unión europea". Ha citado en ese sentido el Brexit, la presidencia de Trump o las políticas económicas del gobierno italiano.
La conferencia se enmarca dentro de la iniciativa Coffee&Break puesta en marcha en 2013. Desde esa fecha se han celebrado 47 Coffee&Breaks en todo el territorio, a los cuales han asistido más de 3.750 empresarios.
CaixaBank cuenta en Euskadi en la actualidad con seis centros de empresa: uno de grandes empresas que facturan más de 100 millones de euros al año y cuatro oficinas, dos en Bilbao, una en San Sebastián, y otra en Vitoria-Gasteiz dirigidos a empresas que facturan entre uno y 100 millones de euros.
