PARÍS, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
Crédit Agricole obtuvo un beneficio neto atribuido de 17 millones de euros en el segundo trimestre del año, lo que representa una caída del 97,5% respecto al mismo periodo de 2013 como consecuencia principalmente del impacto negativo de 708 millones de euros asumido por la entidad francesa por su exposición al Banco Espírito Santo (BES), del que era el segundo mayor accionista con una participación del 14,6%.
"La situación del banco portugués BES llevó a Crédit Agricole a contabilizar el valor de su participación como nulo", indicó la entidad francesa después del rescate del banco luso, que ha sido dividido en un 'banco bueno' y otro 'malo', que será liquidado.
La cifra de negocio de Crédit Agricole entre abril y junio alcanzó los 3.934 millones de euros, un 6,1% por debajo del dato del año anterior, mientras que las provisiones por riesgo de crédito bajaron un 19,6%, hasta 534 millones.
"Nuestros resultados del segundo trimestre confirman las tendencias observadas en los tres primeros meses del año. A pesar de la situación del BES y de su impacto en los resultados trimestrales el Grupo está en la senda establecida cuando anunciamos nuestros planes a medio plazo", destacó el consejero delegado de la entidad, Jean-Paul Chifflet.
De este modo, en el primer semestre del año Crédit Agricole obtuvo un beneficio neto atribuido de 885 millones de euros, un 24% menos que en el mismo periodo de 2013, mientras su cifra de negocio aumentó un 1,2%, hasta 7.946 millones.
