Avanza que el crecimiento de la morosidad del banco se moderará en 2009, y que cuenta con plusvalías latentes de 1000 millones
MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Banco Popular, Roberto Higuera, anunció hoy que el banco tiene suficiente liquidez y que en un escenario pesimista le permitiría mantenerse al margen de las medidas puestas en marcha por el Gobierno, ya que cuenta con una segunda línea de liquidez que podría alcanzar los 20.000 millones de euros a finales de año.
Higuera destacó que el banco "no está contemplando hacer uso de las medidas" del Gobierno porque no tiene necesidad, pero que si le permite alargar plazos, lo considerará. No obstante, incidió en que el banco prefiere "funcionar" con sus propios medios y tener su propia liquidez.
El consejero delegado explicó que la entidad cuenta con una "potente" segunda línea de liquidez que puede ser utilizada con el Banco Central Europeo (BCE) por un importe que supera los 13.350 millones de euros y que aumentará hasta los 18.000 millones al mes que viene y los 20.000 millones a finales de año.
Durante la presentación ante analistas de los resultados del tercer trimestre del año, el consejero delegado insistió que el banco "está tranquilo", porque puede afrontar sin problemas el incremento de la morosidad y la desaceleración del crecimiento económico.
Entre los datos que avanzó para apoyar esta idea destacan que el 'core capital' y el Tier 1 están por encima de la media de los bancos europeos y americanos, y que cuenta con un menor apalancamiento, lo que se traduce en una menor necesidad de capital y una mayor "fortaleza".
Asimismo, recordó que el crecimiento de los depósitos se ha multiplicado por cuatro en relación a los créditos, y que ha reducido el 'gap comercial', lo que le permite no tener que recurrir a financiación externa.
Además, destacó que cuenta con unas plusvalías latentes de entre 800 y 1.000 millones de euros, que podría obtener mediante la venta de inmuebles. No obstante, resaltó que el mercado "no está para muchas bromas" y que la realidad puede ser distinta y registrarse un recorte en este importe.
En este sentido, rechazó llevar a cabo una ampliación de capital para tener más liquidez porque cuenta con una serie de "barreras defensivas" que aseguran el capital ordinario sin tener que recurrir a esa operación, y que en caso de necesitar alguna, optaría por emitir preferentes.
LA MOROSIDAD MODERARÁ SU CRECIMIENTO.
La tasa de morosidad de Banco Popular casi se triplicó en el tercer trimestre del año y se situó en el 2,19% al cierre de septiembre, impulsada por Martinsa-Fadesa, frente al 0,77% que registró un año antes, con una cobertura del 85,57% frente a la tasa del 232,92% con que contaba a 30 de septiembre del año anterior.
Higuera destacó que el banco ha cubierto todos los requerimientos de provisiones por Martinsa y no descartó que tenga que hacer frente al impacto de otras empresas.
En este sentido, destacó que hay clientes con dificultades, aunque destacó que no prevé que se produzca ninguna operación concursal. A su juicio, ha habido empresas que han ido y que no deberían haberlo hecho, y destacó que el concurso de acreedores es una operación compleja en la que se pone en peligro a la empresa y al banco.
"No deberíamos ver situaciones críticas", subrayó Higuera, quien señaló que no puede "predecir si se verá algo", ya que las grandes caídas se están produciendo ahora y a en 2009 podrían darse casos de empresas más pequeñas.
No obstante, el grupo cuenta con 1.956 millones de euros de provisiones para la cobertura de insolvencia, de los que 1.460 millones son genéricas, es decir las que se dotan por el crecimiento del crédito. Asimismo, avanzó que la entidad podrá cubrir sin problemas las nuevas entradas en mora que se produzcan durante los próximos dos años.
En este sentido, avanzó que la morosidad seguirá creciendo hasta al año 2010, pero que se moderará en la segunda mitad de 2009 porque ahora es cuando se está produciendo el caída de importantes empresas inmobiliarias.
COSTES PLANOS.
Por otro lado, el consejero delegado avanzó que el banco aspira a tener un decrecimiento de los gastos y que podría lograr costes planos o negativos en 2009. En este sentido, destacó que los gastos de personal se han reducido mucho, y que se han hecho prejubilaciones durante este año, que continuarán en 2009.
Asimismo, recordó que el banco está cerrando algunas sucursales pero abriendo otras nuevas que están dando lugar a otros gastos, que el banco puede compensar mediante la venta de inmuebles. Higuera también recordó que el banco tiene previsto trasladar su sede a un nuevo complejo y mientras se produce el traslado la entidad se encuentra de alquiler.
Asimismo, señaló que "con la idea de estar sobrados para una crisis larga", la entidad prefiere dar prioridad a las coberturas que a los beneficios, por lo que mantendrá el pay out y los dividendos, aunque reconoció que hay que revisarlo "constantemente".
Por otro lado, Higuera destacó que el banco prevé una reducción del crédito porque la entidad está siendo más exigente en los criterios de concesión, pero subrayó que el banco continúa dando financiación. No obstante, señaló que el crecimiento va a depender del PIB, que a su juicio será negativo en los próximos trimestres, y que, por tanto, el incremento del crédito va a ser de un "dígito bajo".
Por último, indicó, en repuesta a preguntas de los analistas, que es posible una "bajada agresiva de tipos" por parte del Banco Central Europeo, pero recordó que los recortes sólo ayudan en los nueve primeros meses, y que a partir de un año supone una erosión de los ingresos y margen de intermediación, por la estructura de activo y pasivo.
