ZARAGOZA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
Caja Inmaculada (CAI) obtuvo en los primeros nueve meses de 2008 un beneficio neto de 63 millones de euros, un 4 por ciento más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, según los datos facilitados hoy por la entidad de ahorro.
Los resultados han sido "satisfactorios" en la actual coyuntura económica, subrayaron fuentes de la CAI, "con un crecimiento "equilibrado en la actividad y manteniendo altas ratios de liquidez, solvencia y rentabilidad".
El margen de intermediación se situó en 172 millones de euros, lo que significó un incremento del 5 por ciento. Los gastos de explotación aumentaron un 7 por ciento y la margen de eficiencia se mantuvo en el 51 por ciento.
El margen de explotación, a fecha 30 de septiembre, fue de 107 millones de euros. La entidad, de acuerdo con las recomendaciones de prudencia transmitidas por las autoridades económicas, continuó el aumento de las coberturas de riesgos, dotándose hasta ese mes un importe de 39 millones de euros.
Las ratios de rentabilidad se mantuvieron en porcentajes elevados: el ROA (rentabilidad sobre activos medios) en el 0,85 por ciento y el ROE (rentabilidad sobre recursos propios medios) en el 10,26 por ciento.
Durante este ejercicio entró en vigor una nueva normativa contable sobre recursos propios, y con arreglo a ella, la ratio de solvencia de la Caja en junio de 2008 se situó en un coeficiente del 13,92 por ciento, el 174 por ciento sobre el mínimo requerido. El coeficiente sobre recursos propios básicos alcanzó el 8,67 por ciento.
En la Asamblea General de la Caja que tuvo lugar el pasado mes de abril se aprobó la distribución del beneficio del año 2007, que destinó a la Obra Social 24 millones de euros, equivalente al 0,27 por ciento de los activos totales medios del ejercicio, claramente superior al 0,18 por ciento de media de las cajas de ahorros.
El activo del balance de CAI llegó a 10.202 millones de euros, lo que supuso un incremento relativo interanual del 10 por ciento. El volumen de negocio total alcanzó un importe de 20.948 millones de euros, con un crecimiento del 7 por ciento respecto a septiembre de 2007.
La inversión crediticia aumentó el 10 por ciento respecto a la misma fecha, alcanzando un saldo de 8.534 millones de euros, destacando un incremento en los préstamos con garantía hipotecaria del 15 por ciento. En los tres primeros trimestres de 2008 se formalizaron operaciones de riesgo crediticio por importe de 3.100 millones de euros y el crédito total aumentó un 8 por ciento. La ratio de créditos dudosos se posicionó en el 1,76 por ciento, inferior a la media del sector; y la cobertura de dudosos era el 114 por ciento.
Los recursos administrados subieron el 7 por ciento, hasta los 10.931 millones de euros, y los recursos ajenos un15 por ciento, destacando el ahorro a plazo.
El saldo interbancario se situó en una posición prestadora neta de 163 millones de euros, sin apelar al descuento del Banco Central Europeo, "lo que muestra la holgada situación de liquidez de la Caja", con una ratio del 1,60 por ciento del activo, añadieron desde la entidad.
El crecimiento de la actividad de intermediación fue equilibrado. En los nueve primeros meses del ejercicio, los depósitos han aumentado 517 millones de euros y la inversión crediticia 598 millones de euros, de forma que los depósitos representan el 93 por ciento del crédito.
Los fondos propios contabilizaron un saldo de 869 millones de euros, es decir, el 8,5 por ciento del saldo del activo del balance, que fue, además, la 4ª mejor ratio de solvencia en el sector de cajas de ahorros.
Respecto a las previsiones, para final de año la CAI espera que el volumen de negocio aumentará en torno al 7 por ciento y el beneficio neto al 4 por ciento. No obstante, desde la Caja apuntaron que se mantendrá el esfuerzo en dotaciones voluntarias en previsión del "adverso entorno económico" que puede producirse el próximo año, y en línea con la práctica general del sector.
En este sentido, se concentrarán esfuerzos en la atención a los clientes, la mejora de la eficiencia, el equilibrio financiero y la gestión de los riesgos crediticios, manteniendo siempre la elevada solvencia del Caja.
CAI continuó el proceso de expansión en Aragón y en otras comunidades españolas. En los últimos tres meses abrió nuevas oficinas en Zaragoza, Madrid y Chiclana de la Frontera (Cádiz). En la actualidad, dispone de 250 oficinas: 227 en Aragón y 23 en otras provincias españolas.
También la Caja entró a formar parte del accionariado de Oesía, segunda compañía tecnológica española, especializada en tecnologías de la información, electrónica de defensa y outsourcing de procesos de negocio. Esta operación se produjo después de que el pasado 10 de septiembre la compañía tecnológica cerrara con éxito una ampliación de capital por un importe superior a los 40 millones de euros.
CAI y otras cuatro cajas de ahorros se convirtieron en accionistas de referencia al representar entre todas el 60 por ciento del capital de Oesía, que cuenta ya con 3.000 empleados entodo el mundo.
EXPO 2008
Caja Inmaculada (CAI), socio patrocinador de la Exposición Internacional Zaragoza 2008, contó en la Muestra con un pabellón propio 'El Jardín de los tapices', que recibió, entre el 14 de septiembre y el 14 de junio, la visita de 542.000 visitas.
La entidad de ahorro está a punto de firmar con la Sociedad Expoagua el contrato para asumir la gestión de la Torre del Agua y darle un destino esencialmente museístico, con exposiciones artísticas de primer nivel y prestigio internacional.
