Economía/Finanzas.- Intrum Justitia considera necesario diferenciar las estrategias de cobros para afrontar la morosidad

Actualizado: miércoles, 19 marzo 2008 12:52

MADRID, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

La compañía de gestión de créditos Intrum Justitia advirtió hoy a los empresarios de la necesidad de diferenciar las estrategias de gestión de cobros para afrontar la morosidad, dependiendo de si el cliente no quiere o no puede pagar, según informó hoy la empresa en un comunicado.

La recomendación de Intrum Justitia hacia las compañías que se enfrentan a situaciones de impagados por parte de clientes que no tienen liquidez para hacer frente a sus deudas, es que se busque de manera conjunta una solución viable estableciendo plazos o planes de pago.

Por el contrario, el consejo ante clientes que demoran los pagos de manera deliberada es que se tomen medidas rigurosas. Este protocolo de actuación ante la morosidad, no sólo contribuirá a que las empresas gestionen mejor sus créditos sino que, además, las hará aumentar su competitividad.

Según Luis Salvaterra, director general de Intrum Justitia, "es necesario establecer diferencias entre los distintos tipos de clientes y definir escrupulosamente las estrategias a seguir con cada uno de ellos".

Otro factor muy importante para la gestión de crédito es la utilización de herramientas de 'scoring' que sirven para predecir futuros impagos.

Según Henrik Grönkvist, director de automatización y 'scoring' en Intrum Justitia, "esto consiste en una serie de herramientas que procesan datos para determinar las posibilidades de cobrar los pagos, y ofrecer así una mejor idea de cómo saldrán las cosas en el futuro".

En el 'scoring' se combinan diferentes datos que, procesados, permiten tomar decisiones de forma rápida y automatizada y desarrollar diferentes estrategias de gestión de crédito, tanto en el momento de otorgar el crédito como en las gestiones llevadas a cabo posteriormente para asegurar el pago.

El Banco de España anunció esta semana que el índice de morosidad de los créditos concedidos por entidades financieras a particulares y empresas rozó en enero el 1%, frente el 0,83% en el que se situaba en diciembre, lo que se traduce en el repunte intermensual más alto de este indicador desde 1994. Además, el dato se sitúa, con esta séptima subida consecutiva, en su nivel más alto desde noviembre de 2002.