MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
La reducción del número de oficinas de bancos y, sobre todo, de cajas de ahorros obligará a las entidades a incrementar los procesos de externalización de productos y servicios financieros, según la Agencia Negociadora de Productos Bancarios.
El adelgazamiento de la red comercial para reducir costes y por procesos de fusión aproxima a España al modelo bancario del centro de Europa, donde la menor presencia comercial permite que brokers independientes comercialicen prácticamente cualquier tipo de producto o servicio bancario.
Actualmente, la labor de intermediación bancaria en España por parte de terceros se centra en los productos hipotecarios, pero el cierre de sucursales se traducirá en un aumento del campo de actuación de los intermediarios a productos y servicios de activos y pasivos, según la compañía.
A su parecer, esta externalización reducirá enormemente los costes de comercialización de bancos y cajas, que se trasladarán a los intermediarios financieros, que podrán ofertar un amplio abanico de productos incluso de varias entidades financieras al mismo tiempo, y ofrecer así el producto idóneo para cada cliente.
Según los datos que maneja la empresa, actualmente hay más de 43.000 oficinas correspondientes a 49 bancos, 46 cajas de ahorro y 90 cooperativas de crédito.
