Economía plantea un fondo de garantía de depósitos europeo a varias velocidades

Actualizado: lunes, 23 abril 2018 15:54

Apoya la creación de un fondo anticrisis para la eurozona pero no hace mención a los eurobonos

BRUSELAS, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

El ministerio de Economía ha planteado este lunes que los países puedan acceder a varias velocidades al fondo europeo de garantía de depósitos que todavía negocian las capitales, es decir, de forma escalonada una vez que hayan saneado su sistema financiero y reducido el nivel de riesgos a los que se exponen las entidades financieras.

"No se descarta la posibilidad de que, si determinados países ponen mayor esfuerzo en el saneamiento de las exposiciones preexistentes y a la mejora del marco de gestión de riesgos, eso permita a unos países ir más rápido que otros", han explicado fuentes del Ministerio de Economía.

El departamento dirigido por Román Escolano ve con buenos ojos la posibilidad que los países puedan acceder a este fondo de forma gradual, a medida que reduzcan los riesgos a los que se exponen sus bancos, porque este enfoque podría provocar que "todo el mundo se ponga las pilas" y al final el "efecto emulación" haga que "al final todos pueden entrar a la vez".

Esta idea se desprende del documento que ha presentado este lunes el Ministerio de Economía sobre la Unión Económica y Monetaria (UEM), con el que quiere contribuir a los debates en marcha sobre la futura arquitectura del euro.

En este texto España defiende que la "prioridad" es completar la unión bancaria a través de la creación de un fondo único de garantía de depósitos, una propuesta que los socios comunitarios llevan años debatiendo pero sobre la que todavía existen grandes diferencias.

"Llevamos mucho tiempo con estos temas, se ha avanzado mucho en los dos primeros pilares, pero estamos atascados en el resto", reconocen las mismas fuentes. Por eso, el primer objetivo para el Ministerio de Economía es que la cumbre de líderes europeos de junio sirva para acordar a nivel político una fecha "concreta y final" para la entrada en vigor de un sistema europeo de garantía de depósitos "plenamente mutualizado" y "con un mecanismo de respaldo común".

Sin embargo, el Gobierno ve defiende que los riesgos que se vayan a asumir de forma conjunta a nivel comunitario "se hayan tomado con arreglo a reglas comunes". "Para participar plenamente de los beneficios de una unión bancaria completa, se requiere compartir riesgos a través de un sistema común de garantía de depósitos. Sin embargo, a fin de evitar problemas de selección adversa, ello requiere que existan plenas garantías de que la puesta en común del riesgo no se utilizará para cubrir exposiciones relevantes anteriores a la unión bancaria", destaca el documento.

SIN MENCIÓN A LOS EUROBONOS

El texto, no obstante, no incluye ninguna mención a la creación de eurobonos, iniciativa que defendió en diciembre el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al finalizar una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno.

Fuentes del Ministerio de Economía han explicado que la cuestión de los eurobonos no es "estrictamente necesaria" para "garantizar el respaldo fiscal a la unión bancaria" y por tanto, "no son la prioridad", aunque han remarcado que el hecho de que no se mencionen "no significa que no puedan ser buenos".

Algo que sí plantea el documento es la puesta en marcha de una "capacidad de estabilización" a nivel comunitario que complemente los instrumentos específicos de cada país. "Los estabilizadores automáticos nacionales deberían seguir siendo la primera línea de defensa, pero, en casos de crisis graves, serían complementados con una capacidad de estabilización a nivel de la UEM", explica el texto.

Los "principios deseables" de esta herramienta son que sirva para reforzar "el carácter contracíclico" de las políticas fiscales, que no suponga transferencias permanentes entre países, que se trate de un apoyo "automático y temporal", que existan "criterios de elegibilidad" que tenga en cuenta los indicadores de competitividad y del comportamiento fiscal y que haya una "clara separación" con respecto a los instrumentos de gestión de crisis.

En concreto, Economía propone "un enfoque de dos pilares" para este instrumento de estabilización. En primer lugar, un mecanismo de seguro constituido por aportaciones de los Estados miembros en épocas de bonanza económica para realizar desembolsos a países afectados por una "perturbación severa".

Y en segundo lugar, un instrumento de préstamos con la participación del Banco Europeo de Inversiones (BEI) que sirva para cubrir el déficit de inversiones productivas en la eurozona, en particular en el sector privado, en casos de "graves recesiones".

Por último, el Gobierno cree que el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) debe ser "un instrumento clave" para "preservar la estabilidad financiera", lo que implica reforzar su mandato en materia de gestión de crisis.

En este sentido, el Ministerio de Economía propone que esta institución tenga dos funciones principales, que serían la provisión de ayuda financiera a los países con dificultades de acceso al mercado, siempre sujeta a condicionalidad, y el apoyo a la estabilidad del sector bancario "mediante la provisión de un mecanismo de respaldo común" y "una mayor flexibilidad en el uso del instrumento de recapitalización bancaria directa".