MADRID, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del grupo socialista en la Asamblea de Madrid, Maru Menéndez, afirmó hoy que no apoyará las enmiendas presentadas por el PP a la Ley de Acompañamiento, que introduce diversas modificaciones en la Ley de Cajas de la Comunidad, y por ende en Caja Madrid, al tiempo que subrayó que intentará restablecer el necesario consenso en la entidad financiera.
"La posición del grupo es que no vamos a apoyar las enmiendas del PP y vamos a cooperar para restablecer los consensos en Caja Madrid, puesto que es una entidad muy importante, la cuarta del país, y no estamos de acuerdo con que esto se sustancie en una confrontación partidaria o intrapartidaria", manifestó Menéndez en declaraciones a Europa Press.
Menéndez, que recordó que la posición del PSOE será de abstención respecto a la Ley de Presupuestos, donde se han incluido estas reformas, insistió en la absoluta necesidad de alcanzar "un consenso institucional en el ámbito de Caja Madrid".
Aunque aseguró que todavía no han hecho los números respecto al peso del PSOE dentro de la Asamblea de Caja Madrid una vez se incorporen estos cambios, la portavoz socialista dijo que en principio no parece que se altere su representatividad.
Lo que sí criticó fue la incorporación de las universidades privadas, puesto que, a su juicio, "no son entidades representativas de la sociedad civil". Menéndez dijo en este sentido que, aunque se mantiene la influencia de las universidades públicas, éstas deberían tener más peso en la entidad.
Por otra parte, también consideró que las modificaciones de la Ley dan a la Cámara de Comercio de Madrid "un peso mayor al que en el práctica tiene", puesto que también la incorpora como elemento de las entidades representativas.
La portavoz socialista destacó asimismo dos enmiendas del PSOE, en especial aquellas referidas a la solicitud de supresión del apartado dedicado a la privatización del Canal de Isabel II, que a su juicio pasará desapercibido ahora debido a la polémica sobre Caja Madrid.
Otra cuestión que preocupa especialmente a los socialistas es el mantenimiento de las bonificaciones fiscales para gastos educativos, así como los asuntos relacionados con el absentismo de los funcionarios, una cuestión que abogan por que se lleve a la Mesa de la función pública, y no sea un elemento a tener en cuenta en la definición de la carrera profesional o la promoción.
