ANKARA, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Turquía ha anunciado un plan de reformas estructurales y fiscales con el objetivo de reactivar la economía otomana, incluyendo medidas para reforzar la posición de capital de los bancos turcos, después de la crisis que atravesó el país el verano pasado ante el desplome de la cotización de su moneda, según ha desvelado el ministro de Hacienda y Finanzas, Berat Albayrak.
Entre las medidas dirigidas al refuerzo de la capitalización de la banca otomana contenidas en el "Programa de Nueva Economía para la Transformación Estructural 2019", Albayrak ha anunciado que el Gobierno inyectará en las entidades públicas hasta 28.000 millones de liras turcas (4.367 millones de euros) en bonos para "hacer más resistentes los balances".
Asimismo, el ministro otomano ha indicado que se incrementará la posición de capital de las entidades privadas en el marco de los planes de recapitalización de los bancos, introduciendo restricciones al pago de dividendos y bonus.
Por otro lado, Albayrak anunció la creación de un nuevo fondo para abordar el problema de los préstamos fallidos en sectores como la energía y la construcción, sacándolos del balance de las entidades, mientras que se establecerá un nuevo marco legal e institucional para acelerar y hacer más eficientes los procedimientos de reestructuración bancaria y quiebra.
Asimismo, el ministro turco anunció un plan para la reestructuración del sistema de pensiones con el fin de mejorar su sostenibilidad, mientras que en el mercado laboral se llevará a cabo una reforma del mecanismo de compensación por despido, estableciendo un fondo de indemnización, mediante la participación de todas las partes interesadas.
