MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Fomento, José Blanco, aseguró hoy que el Gobierno no tiene intención de introducir modificaciones en el IRPF, a pesar de que algunos grupos políticos dijeron, en el marco de las negociaciones de los Presupuestos, que el Partido Socialista estaba abierto a introducir un nuevo tipo para las rentas más altas.
"Se ha dicho por activa y por pasiva que no queríamos introducir ninguna modificación en las rentas de trabajo y seguimos en esa idea", señaló Blanco en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, en las que aseguró que el Ejecutivo ha tratado de hacer una reforma fiscal donde la progresividad sea un "elemento importante".
Blanco aseguró también que el incremento propuesto para el IVA no se notará "prácticamente", porque actualmente los precios están "absolutamente bajos", lo que permitirá que la mayoría de los ciudadanos pueda seguir incrementando su poder adquisitivo a pesar del ajuste fiscal.
Asimismo, consideró "falsa" la afirmación del PP de que la subida de las rentas de capital va a afectar a la mayoría de los ahorradores, ya que no hay mucha gente que cuente con unos rendimientos superiores a los 6.000 euros. "Eso significa, aproximadamente, tener en depósito 300.000 euros, 50 millones de las antiguas pesetas, creo que no debe haber muchos en este país", apostilló.
A su juicio, serán esos ahorradores, que "son muy pocos", los que tendrán que pagar más por la subida fiscal propuesta por el Ejecutivo. "Me parece que eso es lo que tiene que ser", añadió Blanco, quien pidió una vez más al PP que explique dónde recortaría el gasto para no subir los impuestos.
"Puede ser una debate clarificador", aseveró, tras augurar, sin embargo, que el Partido Popular seguirá utilizando la demagogia diciendo que eliminaría dos Ministerios, algo que no permitiría "ni licitar la cuarta parte de las autovías de la provincia de Lugo".
Sobre si habrá un segundo Plan E el próximo año, Blanco adelantó que sí lo habrá porque el proyecto ha sido "eficaz" al evitar que se destruyeran más de 400.000 empleos y que se cerraran 17.000 pequeñas empresas. "Muchas de ellas tendrían que haber puesto el cartel de cerrado si no fuera por esta iniciativa", aseguró.
