Ibarretxe advierte de que "de la responsabilidad en el consumo al pánico, hay un milímetro"
VITORIA, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, pidió hoy "moderación" a los sindicatos para intentar ver la manera de contener la destrucción de empleo y atenuar las previsiones de 2009 y no llegar a los cuatro millones de parados.
Ferrán realizó estas declaraciones en Vitoria durante el encuentro de empresarios 'Empresas y coyuntura económica. El momento actual', enmarcado dentro de los actos organizados para conmemorar los 30 años de SEA Empresarios Alaveses. En el encuentro estuvieron presentes el ministro de Industria, Comercio y Turismo, Miguel Sebastián; el lehendakari, Juan Jose Ibarretxe; la delegada en funciones del Gobierno central en el País Vasco, Gloria Sánchez; el presidente de SEA, Juan José Azurmendi; y el alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz.
El presidente de la CEOE resaltó que la actual coyuntura económica atraviesa una crisis financiera internacional "más importante" con un alcance "imposible de determinar", y señaló que en España la caída de la actividad ha sido "más rápida, profunda y larga", ya que las previsiones calculan que en 2009 la tasa de parados llegue a los 4 millones en el conjunto del Estado. "No podemos evitar la recesión pero, siendo optimistas, podemos afirmar que podremos salir de esta situación a principios de 2010", indicó.
Al respecto, hizo referencia al 'Plan de rescate' impulsado por el Gobierno central para intentar frenar la "profunda desaceleración que se ha producido en todos los sectores". "Desde CEOE consideramos que la medida es positiva pero no suficiente", indicó, antes de subrayar la importancia de la colaboración entre sindicatos, empresas y agentes sociales.
En este sentido, consideró necesario que las reivindicaciones sindicales se "moderen" para "intentar ver la manera de contener la destrucción del empleo, y así atenuar los datos de 2009 que prevén una subida de 4 millones de parados" insistió. Además, detalló que la "principal preocupación debe ser conseguir parar la destrucción de empleo".
Díaz Ferrán hizo referencia a los últimos datos de paro, que calificó de cifras "tremendamente alarmantes". "Hay que salvar a las empresas, ya que muchas están obligadas a recurrir a EREs porque no tiene la posibilidad de pagar a sus proveedores o incluso las nóminas de sus trabajadores", defendió.
Para ello, pidió a las Instituciones la búsqueda de "medidas excepcionales para la actual coyuntura excepcional, con el objetivo de poder parar la destrucción de empleo", entre las que apuntó la autorización del aplazamiento de impuestos como el IRPF, sin exigencias de intereses por la demora, así como la flexibilización de las relaciones laborales.
LEHENDAKARI
Ibarretxe, por su parte, defendió que en la actual crisis económica se ha demostrado que "los profetas y las recetas no existen" y advirtió de que "hay que tener cuidado con la sobreactuación, ya que puede generar efectos no deseados en la inversión y en el consumo". "Hay que hablar claro, pero sin sobreactuar, porque de la responsabilidad en el consumo al pánico hay un milímetro", defendió.
Asimismo, apostó por dar "respuestas globales y buscar nuevos espacios" para dar solución a la crisis, porque "la autorregulación ha fracasado". Ibarretxe consideró que las respuestas estatales y Europeas han tenido un nivel "adecuado", aunque mostró reservas ante "si se decidieron o no a tiempo". Al respecto, insistió en la importancia del factor tiempo y señaló la necesidad de hacer una utilización "inteligente, rápida y adaptada a las necesidades del Concierto económico".
Por último, el lehendakari enumeró las actuaciones llevadas a cabo por el Ejecutivo vasco junto con las administraciones forales para "hacer frente a la crisis" y lamentó que las cajas de ahorro Kuxa y BBK finalmente no llegaran a un acuerdo de fusión. "Qué pena no tener como instrumento la fusión de cajas en este momento", concluyó.
SEBASTIÁN
El ministro de Industria, Miguel Sebastián, hizo referencia a la importancia de la anticipación para conseguir que las empresas estatales compitan en los mercados globales y consideró la actual crisis "una de las más importantes de la economía mundial desde la crisis del 29". "Los excesos del sistema financiero los pagamos todos", lamentó.
Por otro lado, hizo referencia a la elaboración de un plan integral para la automoción en colaboración con las comunidades autónomas, que contará con 800 millones de euros, y que estará dirigido a "conseguir que la industria de la automoción siga siendo un sector importante en nuestra economía". En este sentido, resaltó que "en España carecemos de centros de decisión, lo que obliga a trabajar de forma coordinada principalmente en el ámbito europeo".
El presidente de SEA, Juan José Azurmendi, subrayó que en el actual ámbito económico todos tienen una responsabilidad, y en especial los trabajadores que "deben ser conscientes de la situación y remar de nuestro lado".
Por ello, insistió en realizar un llamamiento a los trabajadores, y en especial a sus representantes, los sindicatos, para afirmar que "éste no es momento de reivindicar sino de apoyar, de compartir objetivos y filosofías porque de ello depende nuestro futuro".
