Economía/Laboral.- (Ampliación) Gobierno, patronal y sindicatos escenifican la anunciada ruptura del diálogo social

Actualizado: viernes, 24 julio 2009 20:56

MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

Gobierno, patronal y sindicatos escenificaron hoy la ruptura del diálogo social, al menos en la fase actual, tras meses de negociaciones y unas últimas semanas muy tensas en las que la vuelta de la CEOE a su 'programa de máximos' ha encendido los ánimos de los sindicatos y del Gobierno.

Ante la falta de acuerdo, el Ejecutivo tiene la puerta abierta para adoptar en las próximas semanas nuevas medidas para frenar la escalada del desempleo y para reactivar la economía.

De hecho, el Consejo de Ministros del próximo 13 de agosto aprobará por Decreto-Ley la ayuda a los parados sin ingresos, en principio con una duración de seis meses, según anunció hoy el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien se mostró "decepcionado" por la actitud de la CEOE.

La reunión de esta tarde sólo ha servido para evidenciar lo que ya se vislumbraba ayer tarde, cuando la CEOE presentó una propuesta a Gobierno y sindicatos que se salía de los contenidos discutidos hasta el momento y que ambas partes se apresuraron a calificar de inasumible, mostrando además su malestar con la patronal por otra vuelta de tuerca en los acontecimientos.

Según confirmaron hoy a Europa Press los secretarios de Acción Sindical de CC.OO. y UGT, Ramón Górriz y Toni Ferrer, las negociaciones se han dado por rotas en el encuentro de esta tarde, al menos en esta fase, porque el diálogo social, dijeron, "continuará" más adelante.

"Se ha certificado la ruptura en esta etapa. El Gobierno ha planteado que después del rechazo frontal de la CEOE a su propuesta da por finalizada esta etapa", explicó Ferrer, que además precisó que el Ejecutivo no les ha planteado en ningún caso un acuerdo sólo a dos bandas.

Por su parte, Górriz afirmó, en declaraciones a Europa Press, que la CEOE volvió a exponer en la reunión de esta tarde el mismo discurso de los últimos días y que el Gobierno, tanto por tiempo como por el documento presentado por los empresarios, ha decidido dar por zanjada esta fase.

EL ENFADO DE ZAPATERO.

La propuesta que hicieron ayer los empresarios fue resultado de la cena que el pasado miércoles mantuvo Zapatero con los máximos dirigentes de CC.OO., UGT, CEOE y Cepyme. Allí el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, expresó su rechazo a la última oferta del Gobierno (que incluía una rebaja de cotizaciones de 1,5 puntos) a la vez que se comprometió a hacerles llegar un documento con "matizaciones" sobre la propuesta del Ejecutivo.

Dicho documento llegó a manos de Gobierno y sindicatos bien entrada la tarde de ayer, pero enseguida saltaron las alarmas al regresar la patronal a unos planteamientos que CC.OO. y UGT han venido calificando de máximos (rebaja de cotizaciones de cinco puntos y reforma laboral, entre otros puntos).

Poco después de recibir el documento, el Gobierno envió un comunicado en el que expresaba su "profundo malestar" por la actitud de la patronal y, concretamente, por defender, no el abaratamiento del despido, sino ya el despido libre.

El enfado del Ejecutivo se ha hecho aún más patente esta mañana, cuando Zapatero, en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, ha criticado duramente el comportamiento de la patronal y de su presidente, a quienes ha acusado de no haber puesto empeño suficiente en la búsqueda de un acuerdo y de no haber estado a la altura de las circunstancias, máxime ante la actual situación económica.

Zapatero daba así por rotas las negociaciones, al igual que hicieron esta misma mañana los dirigentes de CC.OO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, respectivamente, quienes cargaron contra la patronal por el viraje que han dado sus propuestas.

Después de esto, sólo quedaba escenificar la ruptura de las negociaciones en la reunión de esta tarde, que fue convocada ayer por el Gobierno tras conocer el contenido de la oferta empresarial.

Tras las declaraciones de hoy de Zapatero, la CEOE envió un comunicado en el que también afirma sentirse "decepcionada" por el hecho de que Gobierno y sindicatos no hayan mostrado disposición a abordar, "con ambición y rapidez", reformas estructurales.