UGT y CCOO, dispuestos a tomar "medidas correspondientes al grado de agresión" si el Ejecutivo no retira la propuesta
OVIEDO, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas, más de 30.000 según la organización, tomaron hoy parte en Oviedo en la manifestación convocada por los sindicatos UGT y CCOO bajo el lema "En defensa de las pensiones, no al retraso de la jubilación". La movilización comenzó a las 19.00 horas en la confluencia de la calle Santa Teresa con Avenida de Galicia y finalizó en el Paseo de los Álamos, con la intervención de los secretarios generales de ambos sindicatos, Justo Rodríguez Braga (UGT) y Antonio Pino (CCOO).
Los manifestantes mostraron su oposición a la propuesta del Gobierno de aumentar la edad de jubilación a los 67 años y de elevar el cálculo de pensiones de las mismas.
En declaraciones a los periodistas previas a la movilización, Rodríguez Braga dijo que este tipo de manifestaciones han de servir para que tanto el Gobierno, como la oposición y todos los componentes del Pacto de Toledo sean sensibles al "interés general" y no a los "intereses financieros". Dijo que las pensiones son un sistema "solidario" que hay que reforzar.
Mientras, Antonio Pino, señaló que un Gobierno es creíble "cuando cumple lo que acuerda" y recordó que existen incumplimientos en relación a los compromisos alcanzados en el Acuerdo de Pensiones de 2006. Además señaló que sería importante elevar el Salario Mínimo Interprofesional hasta el 60% del salario medio, para aumentar la base de cotización.
En la manifestación también estuvieron presentes líderes nacionales sindicales como los secretarios generales de UGT y CCOO, Toni Ferrer y Ramón Górriz respectivamente. Ferrer se mostró confiado en que el Gobierno escuche el "clamor" de la calle contra la propuesta de atrasar la edad de jubilación.
Dijo que es "clave" la sostenibilidad del sistema de protección social. "Con estas movilizaciones intentamos que el Gobierno retire esta propuesta", señaló, y dijo que la propuesta es "insolidaria" y "regresiva".
Ferrer, por su parte, explicó que la manifestación es una "llamada de atención" ante una propuesta "injustificada" en el sistema público español. El Gobierno debe volver al "cauce" del consenso. Si la propuesta no es reconsiderada, según Ferrer, UGT y CCOO tomarán "las medidas correspondientes al grado de agresión".
