El PP, junto con PNV y CiU, rechaza el Congreso reducir la jornada laboral a 35 horas

Parado, Paro, Desempleo
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 26 junio 2012 23:05


MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

El PP, junto con el PNV y CiU, han expresado este martes en el Pleno del Congreso su rechazo a la propuesta de Amaiur de reducir la jornada laboral a 35 horas semanales de forma progresiva por considerar que no es una solución al problema del paro.

En su defensa de la moción, el diputado de Amaiur Sabino Cuadra ha señalado que su propuesta --pactada finalmente con la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA)-- defiende el reparto del trabajo hasta reducir las horas a 35 semanales con el mismo sueldo, la supresión de las horas extraordinarias, el fomento de la formación o el favorecimiento de unos servicios sociales y una renta básica que "garantice unas condiciones de vida digna".

Y es que, a su juicio, hoy muchos ciudadanos no tienen ese derecho básico asegurado porque "tienen que aceptar trabajos basura pagados a cuatro perras". "La ministra de Empleo, Fátima Báñez, me dijo en la interpelación que da lugar a esta moción que éste era un debate nostálgico. La única nostalgia es la intención del Gobierno de volver al capitalismo salvaje del siglo XIX, cuando los empresarios eran señores feudales y los derechos eran inexistentes", ha criticado, antes de expresar su solidaridad con los mineros.

El portavoz de Empleo de IU-ICV-CHA, Joan Coscubiela, ha recordado que es un "error confundir productividad con horas de trabajo" y ha subrayado la importancia de este debate, que no es "sobre si se debe repartir el empleo, sino de cómo se reparte", añadiendo que la reforma laboral del Gobierno 'popular' "aplica una política de reparto del trabajo absolutamente insolidario".

EL PARO SE FRENA CON FLEXIBILIDAD

Sin embargo, el presidente de la Comisión parlamentaria de Empleo, el 'popular' José Eugenio Azpiroz, ha insistido en que es un "debate antiguo y caduco" y ha señalado que sería "una pérdida de competitividad clara e inasumible en crisis y en no-crisis", además de que conllevaría inevitablemente una reducción salarial.

Así, ha puesto como ejemplo al sector cooperativista, que ha conseguido "soslayar la pérdida de puestos de trabajo a base de sacrificios y flexibilidad", y ha defendido que precisamente ése es el objetivo de la reforma laboral, siempre "con base en la libertad de llegar a acuerdos" entre empresarios y trabajadores.

Finalmente, ha criticado a quienes piden el adelanto de la edad de jubilación alertando de que España "más que en un invierno demográfico está en un suicidio demográfico". "O cambiamos de rumbo o no tenemos futuro. Al final acabaremos con el desempleo porque no tendremos población que trabaje. Hace falta abordar esta cuestión, que afecta a la Seguridad Social, al empleo, al envejecimiento de la población, a nuestro futuro", ha concluido.

PROPUESTA DIFÍCIL Y CADUCA

La iniciativa de la coalición abertzale también se ha encontrado con el rechazo de la mayor parte de los grupos parlamentarios. Así, la diputada María Pilar Lucio ha defendido la enmienda del PSOE, que recoge algunas propuestas de Amaiur pero no todas, dado que "aplicar bien una política así sería harto dificultoso". Además, ha señalado que sería "poco factible" mantener el sueldo con menos jornada, y ha apostado por la racionalización horaria y la mejora de la competitividad.

A renglón seguido, ha criticado la reforma laboral del PP, que "no genera empleo" sino que "reduce el valor del trabajo para así beneficiar a unos pocos". "El PP está esperando al crecimiento para crear empleo; para ese viaje no se necesitaban alforjas. Pero la solución no puede ser repartir horas de trabajo entre trabajadores", ha zanjado.

En la misma línea, el portavoz de Empleo del PNV, Emilio Olabarria, ha calificado la propuesta de "caduca" y ha coincidido en que aunque no le "gusta" las soluciones que ofrece la reforma laboral, tampoco cree que ésta pase por la "planificación de la economía".

Su homólogo de CiU, Carles Campuzano, ha recordado el "fracaso" del modelo de 35 horas en Francia, poco apoyado por los propios trabajadores, y ha tachado de "poco oportuna" esta medida en el actual contexto económico, en el que sí hay que buscar potenciar el contrato parcial antes que el despido. Así, ha pedido a los diputados que miren a más largo plazo y que tengan en cuenta el impacto de la evolución demográfica en la tasa de desempleo y también las carencias formativas en la población activa.