MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
La reforma del mercado de trabajo que negocian Gobierno, empresarios y sindicatos se firmará en la semana del 8 al 12 de mayo y el texto de la misma podría estar listo a finales de la próxima semana, según informaron a Europa Press en fuentes de la negociación.
El Ejecutivo y los agentes sociales se reunieron esta tarde para empezar a redactar la futura reforma laboral, una vez que sus contenidos están más o menos cerrados.
Las fuentes consultadas por Europa Press indicaron que a finales de la semana próxima se ultimará el texto con el que las partes darán por válida la existencia de un principio de acuerdo en la mesa del mercado de trabajo.
Posteriormente, con la redacción ya atada, Gobierno, empresarios y sindicatos escenificarán la firma del acuerdo en los primeros días de la segunda semana de mayo. Se pondrá fin así a más de un año de negociaciones que en más de una ocasión atravesaron importantes dificultades.
Los agentes sociales tendrán que someter a sus órganos de dirección el visto bueno a la reforma laboral. La Junta Directiva de la CEOE ya ha autorizado a sus negociadores a dar el sí cuando se cierre el acuerdo, mientras que UGT ha convocado para el próximo 8 de mayo a su Comité Confederal.
La reforma, cuyo principal objetivo es la reducción de la temporalidad, incluirá más de 30 medidas, según declaró recientemente el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, que ha insistido además en que no será una reforma de mínimos, sino de amplios contenidos. También el presidente de la CEOE, José María Cuevas, manifestaba esta mismo tarde su convencimiento de que la reforma será amplia.
Entre algunas de las medidas que ya se conocen, la reforma incluirá una rebaja de las cotizaciones al desempleo de los contratos fijos, una reducción en las cuotas empresariales al Fogasa, y cambios en el sistema de bonificaciones a la contratación estable.
Estas ayudas se concederán durante cuatro años, en lugar de los dos actuales, serán cuantías fijas e incluirán a los jóvenes varones de 16 a 30 años entre los colectivos beneficiarios.
Además, y dentro de lo que el ministro Caldera ha bautizado como el plan de choque contra la temporalidad, se ampliará la utilización del contrato de fomento del empleo estable, cuya indemnización por despido es de 33 días por año trabajado frente a los 45 días de los indefinidos ordinarios.
En concreto, éste contrato podrá ser empleado para que los empresarios conviertan empleos temporales en indefinidos. Además, cumpliendo unos determinados requisitos, las conversiones podrán gozar de bonificación, aunque una vez aprobada la reforma, desaparecerán las subvenciones a la conversión.
