Economía/Empresas.-Un consejero del Banco de España destaca la necesidad de I+D para mantener el "excelente" crecimiento

Actualizado: miércoles, 8 febrero 2006 20:11

PAMPLONA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -

El consejero ejecutivo del Banco de España Julio Segura afirmó hoy en Pamplona que España tiene garantizado el crecimiento económico en niveles "excelentes" del 3 por ciento para los próximos dos años, pero advirtió de que a partir de ese momento deberá incrementar sus inversiones en I+D+i para "mantener esta alta velocidad de crucero".

Julio Segura pronunció estas palabras en una rueda de prensa que ofreció en Pamplona, al término de un encuentro que mantuvo con el consejo de administración de Caja Navarra, ante el que sostuvo que el futuro crecimiento económico de España "depende de mejoras genuinas internas que tienen que ver con la productividad y con la competitividad". "Dependemos más de nuestros deberes, lo cual es más divertido, pero más incómodo", agregó.

A juicio de Julio Segura, la economía española tiene "problemas de deficiencia en los niveles tecnológicos, que tienen que ver con un mejor gasto en I+D+i" y ejemplificó que "por cada euro público que se invierte en investigación en España, se genera un euro en investigación en el sector privado, mientras que en Francia la misma inversión pública repercute dos euros en el sector privado".

Julio Segura consideró también necesario abordar la cualificación de la mano de obra porque "España ha generado mucho empleo en estos años, pero la calidad no ha crecido tanto" y apuntó a la necesidad de atender a la evolución de los costes laborales, que "dependen en parte de la productividad y de la negociación colectiva".

El consejero ejecutivo del Banco de España hizo estas consideraciones tras alertar de que en los últimos diez años la economía española "se ha beneficiado de tres factores con los que no contaban otros países del entorno, pero que en estos momentos ya no operan" en favor de España.

El primero de esos factores, a juicios de Segura, fue la reducción de los tipos de interés, que en 1993 estaban al 13 por ciento y en 1996 se situaron en el 3 por ciento. "Otros países europeos también tuvieron una reducción de los tipos de interés, pero del 4,5 por ciento al 3 por ciento", explicó.

El segundo factor es el proceso de "consolidación" presupuestaria, "ya que se pasa de un déficit del 7 por ciento del PIB en 1993 a la actual situación de equilibrio presupuestario". El tercer factor es la entrada en una zona de "fuerte estabilidad de precios", la zona euro.

"Estos tres factores ya no pueden seguir operando en términos diferenciales en favor de la economía española", apuntó Julio Segura, quien argumento que "los tipos de interés van a ser los mismos para todos los socios europeos, que no cabe esperar un superávit importante, y que la ventaja de estar en una zona de estabilidad con precios elevados se ha visto mitigada por la inflación anual de la economía española".

El consejero ejecutivo del Banco de España advirtió de que estas circunstancias "pueden implicar preocupaciones potenciales a medio plazo para el sostenimiento del ritmo fuerte de crecimiento de la economía española".

En este sentido, alertó del "mal comportamiento de la productividad de la economía, sobre todo desde mediados de la década de los 90, donde la productividad aparece estancada, cuando se trata de uno de los factores que deben marcar el futuro crecimiento".

Pese a estas advertencias, Julio Segura aseguró que le "cuesta trabajo pensar que en 2006 no estemos con crecimientos por encima del 3 por ciento, pero ese no es el problema, el problema es que la capacidad para mantener esta tasa durante de varios años depende de la productividad de la economía española".