MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las tabaqueras Gallaher e Imperial Tobacco suben mañana 10 céntimos el precio de sus marcas baratas de cigarrillos 'Coronas Rubio' y JPS, respectivamente, hasta situarlo en 1,95 euros en ambos casos, informaron hoy a Europa Press en fuentes del sector.
Este movimiento comercial sigue la estela que recientemente emprendió British American Tobacco (BAT) con un incremento del precio de 'Pall Mall' en la misma cuantía, estableciéndolo en 1,95 euros la cajetilla.
Estas subidas se producen después de que el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, señalara que sigue existiendo la posibilidad de que el Ejecutivo acometa nuevos aumentos del Impuesto sobre las Labores del Tabaco.
Solbes argumenta que las empresas productoras de tabaco han compensado estos incrementos fiscales con una rebaja del precio de los cigarrillos, con lo que el Gobierno no ha alcanzado sus objetivos sanitarios de descenso del consumo de tabaco.
"Es cierto que la desincentivación (del consumo de tabaco) no se ha producido al 100%, en la medida en que algunas de las empresas productoras de tabaco han compensado las subidas con la bajada del precio de los cigarrillos. En consecuencia, tenemos una cierta contradicción con el objetivo previsto por el Gobierno y eso quiere decir que la posibilidad de volver a incrementar el impuesto sobre el tabaco existe", reiteró.
Otros fabricantes como Altadis aventuraron también que el Gobierno español aplicará una nueva subida de impuestos al tabaco, fórmula que podría normalizar el mercado impulsando un alza de precios de las marcas de cigarrillos más baratas.
Según la tabaquera hispano gala, el impuesto mínimo de 55 euros por cada 1.000 cigarrillos es "muy pequeño" en España en relación al existente en otros países comunitarios, por lo que debería situarse entorno a 70 euros por cada 1.000 cigarrillos.
España es de los países de la UE con un impuesto mínimo más bajo, frente a Dinamarca y Francia, en los que dicho tributo se sitúa en 163 y 128 euros por cada 1.000 cigarrillos, respectivamente. Con un impuesto inferior al de España, se encuentran, entre otros, Grecia y Hungría, con un tributo de 52 y 50 euros, en cada caso.
