Propone una rebaja de 3,5 puntos de las cotizaciones empresariales y un aumento del IVA de dos puntos para crear 280.000 empleos
MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
La economía española permanecerá en recesión y se contraerá un 2,8% en 2009, aunque se empezará a estabilizar a lo largo de 2010, año en el que el PIB caerá un 0,3%, según las últimas previsiones elaboradas por el Servicio de Estudios del BBVA y enmarcadas en el documento 'Situación España' presentado hoy por el economista jefe y director del Servicio, José Luis Escrivá.
Más concretamente, la entidad financiera espera que la caída del PIB alcance su cenit en términos interanuales durante el próximo trimestre, con una caída del 3,3%, para iniciar la fase de estabilización en el último trimestre del año, cuando se registrará una ligera tasa intertrimestral positiva del 0,1%.
Estas previsiones suponen una revisión a la baja de las publicadas en noviembre del pasado año, que fijaban la caída del PIB en 2009 en el 1%. Además, estos pronósticos son peores que las previsiones oficiales del Gobierno, que apuntan a una caída del PIB del 1,6% en 2009 y un crecimiento positivo del 1,2% en 2010.
Este comportamiento de la economía se debe a unas tensiones financieras internacionales "sin precedentes", así como al proceso de desapalancamiento de empresas y familias y al ajuste del sector inmobiliario, que seguirá empujando los precios de la vivienda a la baja durante 2009 y 2010.
Asimismo, BBVA espera que el déficit de las administraciones públicas alcance el 7,2% en 2009, frente al casi 6% previsto por el Gobierno, y que se modere hasta caer el 5,6% en 2010. Se trata de niveles que "no son sostenibles" y que hacen necesario que las medidas fiscales que se adopten sean "neutrales", según Escrivá.
LA TASA DE PARO SE DISPARA.
Por otro lado, el informe indica que la tasa de paro alcanzará el 17,7% en 2009 y el 19,7% en 2010, frente a las tasas previstas por el Gobierno del 15,9% y del 16,7%, respectivamente. En términos absolutos, los casi 3,5 millones de parados alcanzados en el mes de febrero aumentarán hasta los 4,1 millones, con lo que los peores temores del Ejecutivo se verán cumplidos. Más aún, los parados alcanzarán los 4,5 millones en 2010.
Según el Servicio de Estudios del BBVA, gran parte de esta situación se debe a la excesiva centralización de la negociación colectiva, que ha determinado mecanismos de determinación de los salarios inadecuados, a la "dualidad" existente en el mercado laboral entre contratos temporales e indefinidos, así como a la elevada imposición que recae sobre el trabajo.
Por ello, propone una reforma que priorice una descentralización de la negociación colectiva para asociar los salarios a los incrementos de productividad, lo que ayudaría a generar empleo y a introducir menor tensión en los precios.
Así, apuesta por limitar los convenios estatales a aspectos que afecten a todos los agentes por igual; los sectoriales, a materias que condicionan por igual el funcionamiento del conjunto de las empresas del sector; y los de empresa, a los aspectos organizativos y salariales.
NUEVO CONTRATO LABORAL.
Además, propone un nuevo contrato único, que no afecte a los vigentes, con coste de despido creciente, mayor que el actual para los trabajadores más recientes y menor para los más antiguos, de forma que se reequilibren los costes del despido y se acabe con la dualidad.
Asimismo, el BBVA insta a adoptar el sistema austriaco por el que se acumula un porcentaje del salario bruto del trabajador en una cuenta individual gestionada por la Seguridad Social, de forma que, en caso de despido, se pueda utilizar el fondo como indemnización para el trabajador. Además, ese fondo sería transferible si el trabajador cambiase de empresa y revertiría en la pensión si no se utiliza a lo largo de la vida laboral.
Por otro lado, respetando la neutralidad fiscal, el BBVA propuso una medida 'keynesiana' de reducción de 3,5 puntos porcentuales en las cotizaciones sociales de las empresas a la Seguridad Social, que sería compensado con un incremento de dos puntos del IVA diferido en cuatro trimestres, lo que reportaría unos ingresos que retornarían directamente a las arcas de la Seguridad Social. Así se podrían generar hasta 280.000 empleos a tiempo completo en el primer año y aportar cinco décimas de crecimiento al PIB.
ELEMENTOS AMORTIGUADORES.
Por otro lado, el informe prevé un crecimiento negativo del crédito en 2009 por primera vez en muchos años, debido al deseo de las economías domésticas y de las empresas de reducir sus niveles de endeudamiento y de aumentar su ahorro por motivos de precaución.
En paralelo, se espera también un incremento de las renta de las familias apoyado por la bajada de los tipos de interés, la inflación y por el impulso fiscal del Gobierno, que amortiguará el ajuste de la economía.
En el caso de la inflación, el BBVA prevé unos niveles en torno al 0,2% en 2009 (1,4% en 2010), con un diferencial negativo respecto al de la UEM del 0,4%. Según Escrivá, este diferencial negativo "no será sostenible" si no se acometen medidas destinadas, entre otras cuestiones, a mejorar la competitividad. Asimismo, aunque se verán tasas de inflación negativas en 2009, aseguró que "es muy improbable que haya deflación" por el buen papel que vienen jugando los bancos centrales.
Con todo, desde el BBVA se indica que estos elementos no significarán necesariamente un incremento del consumo, debido a la necesidad de las familias de salvaguardar unos niveles de ahorro "por lo que pueda pasar". Así pues, se producirá un incremento de la tasas de ahorro de las familias hasta el 15% de su renta bruta disponible, cinco puntos porcentuales más que en 2007.
