Ofrece los intereses más bajos de la historia en los bonos a 5 años y en las obligaciones a 10 años
MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -
El Tesoro ha colocado 3.530,27 millones en la subasta de bonos y obligaciones de este jueves y ha ofrecido a los inversores los intereses más bajos de la historia, incluso ha conseguido situar el interés del papel a 10 años por debajo del 3%.
De esta forma, el organismo ha superado su objetivo de emisión, ya que esperaba captar entre 2.500 y 3.500 millones. La demanda, en cambio, ha sido más baja que la registrada en la subasta de abril, aunque ha rozado los 6.300 millones.
En concreto, el organismo ha colocado 1.536,79 de los 2.934,82 millones pedidos por el mercado en bonos a 5 años con cupón del 2,75%, de forma que la demanda de los inversores ha superado en 1,9 veces lo vendido (2,3 veces en la anterior ocasión).
Los intereses de este papel se han moderado ligeramente y han marcado un nuevo mínimo. Así, la rentabilidad media ha pasado del 1,663% marcado en abril al 1,648%, mientras que la marginal ha bajado al 1,671% desde el 1,678% anterior.
Por otro lado, el Tesoro ha vendido 1.993,48 de los 3.362,50 millones solicitados en obligaciones a 10 años con cupón del 3,80%, por lo que la demanda del mercado ha superado en 1,7 veces lo emitido (1,8 veces en la anterior ocasión).
En este caso, los intereses también se han moderado y han marcado un nuevo mínimo que ha permitido situar la rentabilidad del bono a 10 años por debajo del 3% por primera vez en la historia. En concreto, el interés medio ha pasado del 3,059% de abril al 2,968%, mientras que el marginal se ha quedado en el 2,988% desde el 3,071% anterior.
SUBASTA SUPERADA CON ÉXITO
De esta forma, el organismo ha superado con éxito la última subasta del mes, después de haber colocado 3.515,31 millones en la emisión de letras a 3 y 9 meses del pasado martes. En el conjunto de la semana, el Tesoro ha vendido más de 7.000 millones.
Además, el organismo ha sorteado el incremento de las tensiones que se produjo la semana pasada por los malos datos económicos en la eurozona y el rumor de un nuevo impuesto en Grecia para tenedores extranjeros de deuda, que catapultó a la prima de riesgo al entorno de los 170 puntos.
