BUENOS AIRES, 25 Nov. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -
Dirigentes empresariales expresaron hoy su apoyo a las medidas anunciadas por la presidenta argentina, Cristina Fernández, para hacer frente a la crisis financiera, entre las que se encuentra la creación de un Ministerio de la Producción y la concesión de incentivos fiscales.
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Lascurain, destacó que "estas son las medidas que se deben aplicar, son preactivas y generarán más trabajo". "No teníamos una expectativa que la presidenta iba a anunciar medidas, y el hecho de que haya venido y que haya anunciado lo que dijo hace que todo el cuerpo orgánico de la UIA esté satisfecho", agregó tras el cierre del discurso de la presidenta en la sede de esta organización.
"Creo que la decisión fue realmente importante, es una señal donde se consolida la producción y el trabajo, que es el principal eje de este Gobierno. A través del nuevo Ministerio se podrán canalizar con mayor rapidez los temas que hacen a la problemática industrial", opinó Osvaldo Rial, vicepresidente de la UIA.
El presidente de la filial local de la FIAT, Cristiano Rattazzi, opinó: "Esto es muy importante, veo a un gobierno que se preocupa por la economía real. Vamos por un período muy complicado en todo el mundo y tampoco será fácil en Argentina. Pero estas medidas ayudarán a sortearlo".
El ministro del Interior, Florencio Randazzo, dijo a su vez que las medidas anunciadas están orientadas "no sólo a sostener el nivel de empleo, sino a generar nuevos puestos de trabajo" y a "mantener el nivel de producción".
"La importancia de tener un Ministerio de la Producción apunta a compensar aquellas dificultades que pueda tener Argentina en materia de producción", agregó y resaltó que "todas las medidas están destinadas a sostener la producción el consumo interno y las exportaciones".
MEDIDAS CONTRA LA CRISIS
Fernández anunció hoy la creación del Ministerio de la Producción, en el marco de una serie de medidas para hacer frente a la crisis financiera durante su intervención en un seminario organizado por la Unión Industrial Argentina (UIA) con el objetivo de mantener el crecimiento de la economía y evitar una ola de despidos.
Asismo, dijo que enviará al Congreso un proyecto de ley para que los argentinos que enviaron de forma ilegal sus fondos al extranjero puedan repatriarlos sin sufrir ningún tipo de castigo. Diversos economistas calculan que hay unos 100.000 millones de dólares de particulares y empresas fuera del país.
"Quienes declaren sus capitales sin traerlos al país, pagarán 8% de impuestos; los que los traigan, el 6%; quienes los inviertan en títulos de la deuda, 3%, y quienes los inviertan en infraestructura, inmobiliario, actividad agroganadera, el 1%", precisó la presidenta argentina.
Fernández dijo que de esa forma se buscará "reorientar fuertemente los fondos de esos argentinos que por distintas causas descreyeron del país, para lograr un mayor grado de inversiones y productividad para ellos y para la economía".
La mandataria también anunció que las empresas que contraten nuevos empleados el año próximo se verán beneficiadas con una serie de incentivos fiscales, como una dismunición en la contribución por cargas sociales que deben abonar las empresas.
"Es un plan que no significa un ahogo para las empresas, es una promoción de nuevos trabajos registrados; con una salvaguarda para que no se permita un cambio en la planta de trabajadores para no pagar contribuciones patronales", explicó la mandataria.
Los efectos de la crisis financiera internacional se han comenzado a sentir en Argentina, donde la actividad de la industria tuvo una caída del 1,9% en octubre respecto de septiembre y sólo creció un 2,5% respecto de octubre de 2007.
Sobre la creación del Ministerio de la Producción, la mandatario dijo que "el principal objetivo es sostener la actividad y el nivel de empleo, hoy más que nunca". Y añadió que "vamos a hacer todos, cada uno en su función que le toca, un gran esfuerzo para que, finalmente, podamos cumplir con ese objetivo de sostener la actividad".
La presidenta dijo ante los industriales, uno de los sectores que más impulsaron el crecimiento de la economía en los últimos cinco años, que es necesario "articular un trípode virtuoso" entre los empresarios, los trabajadores y el Estado con el objetivo de "sostener la actividad económica y los niveles de empleo".
