MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un informe de Visa predice que los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Londres 2012 tendrá una inyección de gasto en el Reino Unido de unos 6.000 millones de euros, rompiendo todas las cifras anteriormente logradas por las anteriores eventos olímpicos.
Según el informe "Una oportunidad de Oro- El gasto y el impacto de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Londres 2012", elaborado por Visa Europe, este incremento en el gasto de los consumidores durante las Olimpiadas aportará "un estímulo económico sostenido" valorado en 6.000 millones de euros para la economía británica hasta el año 2015. Esto representa aproximadamente el 3,5% del crecimiento total anticipado para la economía de ese país entre el periodo 2013-2015.
La economía británica recibirá una inyección de 742 millones de euros durante las tres semanas de los Juegos Olímpicos y un suplemento de 154 millones de euros durante la celebración de los Juegos Paralímpicos, lo que supone un total de 896 millones de euros durante las siete jornadas completas, un incremento del 18,5% sobre lo que se estima que se hubiera generado en el mismo periodo sin la celebración de los Juegos.
El impacto positivo en la economía será principalmente el resultado de un incremento en la llegada de visitantes extranjeros a Reino Unido. A lo largo de las siete semanas, se estima que los turistas internacionales gasten un total de 847 millones de euros. Esta cifra de gasto procedente de visitantes extranjeros sería la más alta experimentada en unos Juegos Olímpicos. En Sydney 2000 y Atenas 2004 la cifra fue la mitad aproximadamente, mientras Pekín 2008 se estimó en 111 millones de euros.
El nivel de gasto más alto esperado en Londres 2012 puede atribuirse a su ventajosa posición geográfica respecto a Europa y a otros mercados clave internacionales, además de los costes más elevados que se asocian con una visita a Londres, según reza el informe.
A nivel interno, se espera que el gasto de los consumidores británicos se incremente en 48 millones de euros, con lo cual pasaría a ser la primera vez que en un mercado anfitrión se incrementa el gasto nacional, pues normalmente éste tiende a reducirse durante la celebración de los Juegos.
El informe atribuye esta paradoja al "cambio en la conducta de gasto", ya que los británicos cambian sus comportamientos tradicionales de gasto durante el verano, contagiándose además del 'espíritu olímpico', abasteciéndose en los supermercados para disfrutar de los eventos deportivos desde sus casas.
