Economía/Macro.- Zapatero traslada a la Ejecutiva del PSOE que no teme el debate de financiación y se muestra optimista

Actualizado: lunes, 1 septiembre 2008 21:14

Recordó que en las negociaciones de los otros modelos también se produjeron tensiones e insiste en que hay margen para un pacto


MADRID, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, trató hoy, durante la Ejecutiva socialista, de quitar hierro a los debates que se están produciendo en torno a la negociación sobre la financiación autonómica. Según fuentes socialistas consultadas por Europa Press, el jefe del Ejecutivo afirmó que le parecía bien que se produjera un debate en torno a la financiación y que no temía ningún debate sobre esta cuestión mientras se haga aportando argumentos y razones.

Zapatero comenzó su intervención esta mañana, en la primera Ejecutiva socialista tras las vacaciones de verano, refiriéndose al accidente aéreo de un avión de Spanair, que ha costado la vida a 154 personas. Un asunto al que se han referido varios miembros de la Ejecutiva durante sus intervenciones, en las que han destacado la actuación del Gobierno ante la tragedia.

Tras esta cuestión, el jefe del Ejecutivo abordó otros dos temas que han ocupado buena parte de la reunión de esta mañana: la crisis económica y el debate sobre el nuevo modelo de financiación autonómica.

En relación a este último asunto y tras la polémica que ha tenido lugar a lo largo de todo el verano, Zapatero quiso quitar hierro a las tensiones surgidas, recordando que en otras ocasiones, cuando se han negociado los modelos anteriores de financiación autonómica, también se han producido tensiones. Algunas, según apuntaron las fuentes consultadas, porque las CC.AA. se consideraban perjudicadas con el modelo vigente y otras porque temían no salir beneficiadas con el nuevo.

Expuso que el Gobierno socialista está tratando de modificar un modelo que ha fracasado, que fue el pactado por el PP con CiU y que ahora se trata de encontrar un buen sistema que satisfaga las necesidades de las autonomías.

Las fuentes consultadas explicaron que el presidente se mostró en todo momento muy optimista ante la posibilidad de que se llegue a un acuerdo, porque considera que hay margen para ello.

En este sentido, Zapatero dijo entender que haya debate e incluso apuntó que este debate le parecía bien, siempre que se produzca aportando argumentos y razones.

Las mismas fuentes explicaron que el jefe del Ejecutivo también se refirió a algunas intervenciones en las que se había criticado que se esté dando la impresión de que la reforma de la financiación se hace porque lo pide Cataluña, para apuntar que no es sólo esta CC.AA., sino muchas las que han considerado fracasado el modelo del PP.

UNAS SEMANAS.

En este punto, recordó también que él había defendido el Estatuto y que estaba muy orgulloso de haberlo hecho a pesar de las críticas recibidas por parte de la oposición. En su opinión, el ruido es inevitable, pero no debe despistar de cuál es el objetivo final, según precisaron las fuentes consultadas, quienes explicaron que el presidente insistió en el margen que hay para llegar a un acuerdo y que, aunque precisó que no es cuestión de días, si lo puede ser de semanas. Según las citadas fuentes, en el ánimo de los presentes quedó la idea de que el acuerdo podría estar antes de finalizar el año.

Sobre este asunto, además de otros intervinientes, realizó una exposición el portavoz del PSC, Miquel Iceta, quien, según las fuentes consultadas, realizó un resumen de un reciente artículo que había escrito en prensa en el que destacaba la importancia de que se escuchen las razones de todo el mundo en este proceso de negociación.

TODAS LAS CC.AA. DEBEN EXPONER SUS ARGUMENTOS.

Según la exposición que realizó Iceta, si todas las CC.AA. explican sus razones, después, cuando se llegue a un acuerdo, no parecerá que Cataluña ha impuesto algo, sino que se verá que, de las razones que ha puesto encima de la mesa, se han admitido algunas. De esta forma, razonó el portavoz de los socialistas catalanes, el acuerdo final no será ni la victoria, ni la derrota de nadie, porque nadie tiene toda la razón.

El jefe del Ejecutivo también abordó la situación de crisis económica en la que se encuentra el país y, tras exponer que había pedido su comparecencia en el Congreso, argumentó que lo ha hecho por entender que lo que corresponde al inicio de un curso político con una situación económica adversa es explicar las medidas que se han tomado y las perspectivas que se tienen.

OBJETIVO, MITIGAR LA DESTRUCCION DE EMPLEO.

Zapatero admitió que el empleo se va a resentir y por ello y para intentar mitigar al máximo esta situación, será una de las cuestiones que se aborde en el debate de su comparecencia en el Parlamento. "Me gustaría que fuera un gran debate sobre las políticas de apoyo a la creación de empleo, que es sin duda el gran objetivo que ahora tenemos", había afirmado el presidente durante una entrevista en televisión, poco antes de intervenir en la Ejecutiva socialista.

El jefe del Ejecutivo también realizó un repaso a los grandes indicadores macroeconómicos, así como la situación de otros países y realizó la comparación con España, exponiendo que mientras otros tienen crecimiento negativo, el de España sigue siendo positivo aunque pequeño.

También puso de manifiesto que hay algunos datos que mejoran, como la bajada del precio del petróleo o el aumento de la productividad. Precisó que si el primero de estos datos se mantiene, la inflación podría acabar el año en el entorno del 4 por ciento. Finalmente, Zapatero abordó en su exposición los congresos del partido que aún están pendientes, entre ellos los de Valencia y de Madrid.

Otro de los asuntos que se abordó durante la Ejecutiva fue la situación en el País Vasco. En este caso, el representante del PSE en la Ejecutiva Federal, Rodolfo Ares, expuso, según las fuentes consultadas, que la previsión, por las informaciones de que disponen, es que las elecciones serán hacia febrero, marzo o abril del próximo año, salvo que el lehendakari tomara la decisión de convocarlas en otoño.