MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El portavoz económico del PNV, Pedro Azpiazu, ha acusado este martes al Gobierno de hacer los Presupuestos "mal a propósito" al "dibujar un escenario de deseos piadosos que sólo pueden inspirarse en un optimismo insustancial sin ninguna base real", añadiendo que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha hecho "sus trampillas" para conseguir cuadrar las cifras.
Durante su primera intervención en el debate del proyecto de Presupuestos de 2013 en el Pleno del Congreso, el diputado vasco ha enmarcado esta actitud en la conciencia del Gobierno de que "puede aplicar el rodillo de la mayoría", por lo que optan por "evitar un debate público incómodo sobre el conjunto de la gestión económica del Gobierno".
Porque, a su juicio, el proceder del Ejecutivo 'popular' consiste en hacer unas cuentas "inverosímiles" para, luego, "intentar taponar la enorme hemorragia que acaba produciéndose con medidas inconexas, injustas, pero a la vez brutales que, a menudo, tienen efectos secundarios y retroalimentan algunos de los problemas que tratan de combatir".
En este sentido, ha dicho que las previsiones del PIB son "irreales y falsas, más voluntaristas que rigurosas", que los ingresos están "artificialmente inflados" y que los gastos en pensiones y prestaciones por desempleo se "cuantifican muy por debajo de lo que sería razonable" porque "a pesar de todo les resulta imposible cuadrar las cifras". "Y eso que no está aún despejada la cuestión de la actualización de las pensiones", ha añadido.
YA PASÓ EN 2012
Esto es, a juicio de Azpiazu, lo que sucedió con las cuentas de 2012 y lo que, a la vista de la "ficticia" previsión de crecimiento económico y evolución del paro, sucederá también el año próximo, por lo que "nuevamente habrá que taponar enormes agujeros sobre la marcha".
"Y el Gobierno lo hará otra vez a su manera, con un repertorio de parches que no distribuyen justamente la carga y que, además, arruinan cualquier idea de un marco coherente de política económica", ha añadido, recordando que en seis meses "la situación económica se ha deteriorado de manera significativa".
A renglón seguido, ha acusado al Ejecutivo de ser "más papistas que el Papa" e "incapaces de defender una senda de déficit y consolidación fiscal equilibrada". "Y, recorte tras recorte, reforma tras reforma, nos están llevando a una crisis cada vez más profunda y aguda que luego provoca una rectificación en los objetivos ante los hechos consumados", ha añadido.
"LA SOLUCIÓN NO ESTÁ EN NUESTRAS MANOS"
A renglón seguido, Azpiazu ha reconocido que "el tema no es nada fácil", sobre todo porque "gran parte de la solución no está en nuestras manos" sino en las de la Unión Europea. Por eso, ha pedido un "giro en la política" comunitaria, para la cual es necesario que el presidente, Mariano Rajoy, deje claro a los socios europeos que "continuar exactamente con la misma receta no conseguirá reducir el déficit público".
Porque, a su juicio, es "vox populi" ese incumplimiento, aunque el Gobierno "no lo reconozca hasta que no se cierre el ejercicio" y, por tanto, continúa actuando "como si hubiera margen para nuevas reformas y nuevos recortes" que "en ausencia de una intervención exterior decidida pueden llevar a un punto sin retorno".
"El único norte que se ha marcado el Gobierno es el de cumplir estrictamente con el objetivo de déficit público, sacrificando a tal fin el crecimiento económico y las políticas sociales. El déficit se ha convertido en un tótem que, además de sumirnos en una mayor recesión, va a ser imposible de cumplir, y eso que el Gobierno ha hecho sus trampillas para cuadrar las cifras y no presentar unas más alarmantes de las que ya contempla este Presupuesto", ha añadido.
LOS RECORTES NO BASTAN
"La economía española no es capaz en base a recortes presupuestarios y reformas de salir del profundo agujero en que se encuentra", ha dicho, reclamando que la Unión Europea "asuma el papel que le corresponde" y no se limite a "dar una brizna de oxígeno" cuando el país está "a punto de fenecer" mientras exige reformas "más profundas" en cuanto se da "una mínima recuperación".
Porque, según Azpiazu, también en la UE se está dando "una forma anárquica y desorganizada que responde más a los apretones del momento que a una estrategia premeditada y consistente", con medidas para "salir del apuro, y no contundentes y definitivas" como sería la adopción de una posición fiscal común o el reconocimiento de "la necesidad de un nuevo equilibrio norte-sur".
"Hay que revisar, pues, el calendario del déficit público de España y establecer una posición fiscal común europea que tenga en cuenta el peso específico de cada país, incluso con un presupuesto específico de apoyo para los países del euro", ha insistido, considerando este momento "adecuado para empujar políticamente en esa dirección".
SIN VOLUNTAD DE ACUERDO
Con respecto a la petición del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de que la oposición retire sus enmiendas y pacte enmiendas parciales, el diputado del PNV ha dicho que el debate de las cuentas de 2012 mostraron la "nula voluntad del Gobierno de llegar a acuerdos, de acercar posturas, de tratar de buscar encuentros y complicidades que nos permitieran afrontar la crisis de una manera más solidaria, consensuada y sensata".
"Recuerdo también su total incomprensión y su invitación a nuestro grupo a que brindara sin más su apoyo a unos Presupuestos que, por lo tanto, parecía que constituían una verdad revelada, no sujeta a discusión", ha dicho, espetando a los 'populares' que "o están dispuestos a cambiar ese proceder o no tiene mucho sentido seguir hablando".
En la misma línea, ha criticado que la oposición y los españoles se enteren de asuntos como el rescate bancario por la prensa, apuntando que eso "no sólo es grave sino que además constituye una burla al Congreso y al juego democrático" que los nacionalistas vascos no están "dispuestos a seguir tolerando".
Además, ha criticado que, "como ya ocurriera con el Presupuesto de 2012", el retraso en la petición de ese rescate a la UE responde a "espurios intereses partidistas relacionados con las elecciones gallegas y vascas".
PRESUPUESTOS VASCOS
Finalmente, Azpiazu ha hecho referencia a las transferencias e inversiones en el País Vasco que recogen estas cuentas, señalando que "desgraciadamente" el Gobierno "se olvida" de la región como demuestra, a su juicio, que "la obra pública es prácticamente inexistente".
Así, ha lamentado la paralización del proyecto de la 'Y' vasca, la desaparición de partida del proyecto de Espalación o los recortes en las subvenciones a la cultura. "Esto demuestra una falta evidente de compromiso de su Gobierno con Euskadi", ha concluido.
