Economía.- Rajoy lamenta que Zapatero "meta el dedo en el ojo" a Berlusconi y Sarkozy para defender la economía española

Actualizado: jueves, 25 septiembre 2008 21:31

Insta al Gobierno a "tomar decisiones", como la "austeridad" o la apuesta por las pymes, porque "de la inercia no se vive" siempre

BARCELONA, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP, Mariano Rajoy, lamentó hoy que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, citase ayer al presidente de la República Francesa, Nicolas Sarkozy, y al del gobierno italiano, Silvio Berlusconi, para defender la solidez de la economía española.

Durante su conferencia en la sede de la patronal Pimec, que agrupa a las pymes catalanas, dijo que Zapatero no tiene "ninguna razón para meter el dedo en el ojo de Berlusconi y Sarkozy".

Consideró que lo que tenía que haber hecho Zapatero es decir que "aquí se gobierna y se coge el toro por los cuernos", algo que no ocurre, según Rajoy, ya que el Ejecutivo Central parte del "diagnóstico equivocado y la falta de coraje para gobernar".

Zapatero, que está en Nueva York para participar en la Asamblea General de la ONU y la cumbre sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio, defendió ayer la solidez de la economía española y particularmente de su sistema bancario, y recordó que en la última década ha crecido hasta convertirse en la octava potencia económica del mundo según el PIB.

Ayer, en relación con el avance de España en renta per cápita, Zapatero dijo: "Hemos superado la media europea y a Italia, cosa que deprime mucho al primer ministro Berlusconi; pero nuestro objetivo es superar a Francia en tres o cuatro años, y esto no lo quiere ni oír nuestro amigo Sarkozy", ironizó.

"TOMAR DECISIONES".

"Ahora hay que empezar a tomar decisiones", dijo Rajoy, quien también apostó por rebajar en un 20% el Impuesto de Sociedades a las empresas, dar más "independencia" a los organismos reguladores para darles más "prestigio", luchar contra el abandono escolar, cambiar el modelo energético para evitar ser tan dependientes del petróleo, y vigilar los precios y "liberalizar los mercados con mayores trabas", entre otras medidas.

"De la inercia no se vive indefinidamente, y ahora hay que empezar a tomar medidas", proclamó Rajoy, quien dijo que "cada día que pasa sin hacerse nada" se ponen "en riesgo muchas familias españolas". "Estoy convencido de que la crisis se va a superar, pero me gustaría que fuera pronto", lo que implica actuar, añadió.

Por todo ello, Rajoy indicó que para invertir la situación, es necesaria una fuerte apuesta no por sectores económicos en concreto, sino por las pequeñas y medianas empresas, que representan el 80% del sistema económico español.

"AUSTERIDAD" Y CONTENER EL GASTO PÚBLICO

Rajoy recordó al empresariado catalán las propuestas que presentó en el Congreso para atajar la crisis. Entre ellas, un "programa de austeridad de las cuentas públicas" no sólo de la administración estatal, sino también de las autonomías y los entes locales.

"El incremento del gasto público es letal", ya que se da un "mensaje muy negativo" al teijdo económico, apreció Rajoy. La contención del gasto público permite "reducir la inflación y el déficit exterior", que precisamente, son dos de los problemas que tiene históricamente el sistema económico español, diagnosticó.

"El gasto público no puede crecer por encima del 2%", dijo Rajoy, quien destacó que esta fue una de las prioridades que afrontó el primer Gobierno de José María Aznar en el año 1996, tras ganar las elecciones generales.

Durante la pasada legislatura, el gasto público del Estado creció un promedio del 9% anual y mucho de este gasto ya es "estructural, consolidado", apreció Rajoy, quien contrastó estas cifras con el crecimiento del gasto público del último presupuesto que hizo el PP, el de 2004, que crecía un 2,4% en relación al año anterior, menos que el crecimiento nominal de la economía.

"SITUACIÓN PEOR" QUE EN OTROS PAISES.

Rajoy diagnosticó que España parte de la crisis desde una "situación peor" en relación a otros países. "Estamos más endeudados que los demás" y las familias y empresas tienen problemas de liquidez porque los bancos y cajas han restringido los créditos, con lo que "en Stuttgart (Alemania) o Amsterdam (Holanda) es más fácil conseguir un crédito que no en Barcelona o Madrid", apreció.

"Lo que se trata es de disipar las dudas que hay sobre la economía española" para generar confianza, y "esto no se arregla con una varita mágica", ni tampoco gobernando "en el día a día" sin pensar "a medio y largo plazo", consideró Rajoy.