MOSCÚ (RUSIA), 17 Ene. (Reuters/EP) -
El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha afirmado este miércoles que el proceso de incertidumbre derivado de la crisis política en Cataluña tendrá un impacto en el crecimiento de la economía española, pero no será "muy significativo".
Así lo ha señalado Linde durante su intervención en un foro económico Gaidar en Moscú (Rusia) sobre el proteccionismo y el papel de los bancos centrales en el mundo globalizado, en el que ha asegurado que "sin duda" la situación derivada del desafío independentista en Cataluña "va a tener un impacto en el crecimiento del PIB español este año".
No obstante, ha matizado que por los datos que dispone hasta la fecha el organismo supervisor, dicho impacto no será "muy significativo" en el crecimiento del PIB español en el ejercicio 2018.
En un informe publicado en noviembre, el Banco de España preveía un impacto en el PIB de España de entre tres décimas y 2,5 puntos entre finales de 2017 y 2019 si persiste la crisis política en Cataluña, de forma que podría llegar a reducirse en un 60% el crecimiento previsto para los dos próximos ejercicios en el peor de los escenarios.
En concreto, contemplaba dos posibles escenarios del impacto de la crisis de Cataluña en la economía española. En el primer escenario de "tensionamiento transitorio y acotado de la incertidumbre", que contempla que el nivel de riesgo aumenta de manera transitoria durante el cuarto trimestre de 2017 y retorna en el primer trimestre del año próximo al nivel del escenario base, la pérdida acumulada de PIB hasta finales de 2019 sería de unas tres décimas, como reflejo, fundamentalmente, de un menor crecimiento en lo que resta de este año y a principios del siguiente.
Por su parte, en el escenario de tensionamiento más severo y prolongado, que proyecta las cotas más altas de incertidumbre de los últimos años, como la crisis financiera global o el rescate bancario en 2012, el PIB se reduciría en términos acumulados algo más de 2,5 puntos porcentuales entre finales de 2017 y 2019.
De hecho, en diciembre rebajó al 2,4% la previsión de crecimiento del PIB en 2018 y al 2,1% la de 2019, una décima menos de lo estimado inicialmente en ambos casos, como consecuencia de la "incertidumbre asociada a la situación de Cataluña", cuyos efectos considera que se verán "parcialmente compensados" por la mejora de las perspectivas de los mercados exteriores.
En el último informe trimestral de la economía española, publicado a finales de diciembre, la autoridad monetaria indicaba que la actividad en Cataluña se habría desacelerado en el último trimestre del año "en mayor medida" que en la media de las demás comunidades autónomas y atribuía esa ralentización al "peor comportamiento" de los indicadores de empleo, turismo y mercado de la vivienda, entre otros, con respecto a lo observado en la media del conjunto de las comunidades, especialmente, en las de mayor peso económico.
No obstante, señalaba que a pesar de este menor crecimiento del PIB catalán, los últimos datos disponibles van confirmando que el impacto de la crisis catalana en el conjunto de la economía española se limitará, según su escenario "más benigno", a una pérdida acumulada de tres décimas hasta finales de 2019.
Por su parte, el Gobierno rebajó del 2,6% al 2,3% su previsión de crecimiento para 2018, al estimar un impacto de unos 5.000 millones como consecuencia de la crisis política en Cataluña.
