MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno elevará la presión fiscal en España en seis décimas el próximo año con la subida de impuestos y la creación de nuevas figuras impositivas, pasando del 34,93% al 35,54%, mientras que el gasto en Educación y Sanidad se mantendrá en los mismos niveles en términos de PIB en 2019.
Así figura en el Plan Presupuestario de 2019 remitido este lunes por el Gobierno a la Comisión Europea, en el que le comunica que su estrategia fiscal para el conjunto de administraciones públicas consiste en aumentar la ratio de ingresos públicos sobre PIB desde el 38,5% del 2018 al 39,1% del PIB en 2019, y una ratio de gasto decreciente en 0,3 puntos de PIB, desde el 41,2% del PIB de 2018 al 40,9% en 2019.
Estas previsiones se sitúan en todos los casos por debajo de las estimaciones de la Comisión Europea, que augura unos ingresos del 38,1% del PIB este año, frente a unos gastos del 40,7%; y unos porcentajes del 38,1% y el 40%, respectivamente, el próximo ejercicio.
La mejora en los ingresos prevista para 2019 se debe al paquete de medidas por importe de 5.678 millones de euros que está diseñando el Gobierno algunas de las cuales se aprobarán en los próximos días, para que impacten desde el 1 de enero de 2019, y al mayor incremento de las cotizaciones sociales como consecuencia de la subida del salario mínimo interprofesional.
Así, los impuestos sobre la producción y las importaciones pasarán del 11,7% del PIB en 2018 al 11,9% del PIB en 2019. Lo mismo sucede con los impuestos corrientes sobre la renta y la riqueza que aumentan del 10,5% del PIB en 2018 al 10,7% del PIB en 2019.Por último los Impuesto sobre el capital se mantienen en 2019 en el 0,5% del PIB.
TRES ANTEPROYECTOS DE LEY EN LAS PRÓXIMAS SEMANAS
Las nuevas medidas tributarias contempladas en este plan presupuestario anual serán incluidas en tres anteproyectos de leyes que serán tratados en el Consejo de Ministros en las próximas semanas, según señala el Ejecutivo en el plan presupuestario.
Concretamente, se trata de los anteproyectos de leyes de lucha contra el fraude y transposición de la Directiva antielusión (ATAD), de creación del Impuesto sobre determinados servicios digitales y de creación del Impuesto sobre las Transacciones Financieras.
El resto de nuevas medidas tributarias contempladas en el documento serán incluidas en el anteproyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019, que será tratado en un Consejo de Ministros de "finales de noviembre o principios de diciembre".
SE MANTIENE EL GASTO EN EDUCACIÓN Y SANIDAD
Por el lado del gasto, la ratio se reducirá hasta el 41,2% del PIB en 2018 y hasta el 40,9% en 2019. Esta contención se debe a que el crecimiento del gasto nominal en estos dos años queda por debajo del crecimiento del PIB.
A pesar del aumento de la presión fiscal en seis décimas, el plan presupuestario remitido por el Gobierno a Bruselas refleja un mantenimiento del gasto público en Educación y Sanidad el próximo año. En el primer caso, el gasto se mantendrá en el 4% del PIB, representando el 9,7% del gasto total, mientras que el gasto en Sanidad permanecerá en el 6% del PIB, el 14,6% del total.
Por su parte, el gasto en Empleo se elevará una décima, hasta el 1,9% del PIB en 2019, representando el 4,6% del gasto total.
El mantenimiento del gasto en Educación y Sanidad en porcentaje de PIB se mantendrá a pesar de que el PIB utilizado por el Gobierno para hacer el cálculo es mayor en 2019 (1,261 billones de euros) que este año (1,211 billones de euros).
En porcentajes de PIB, se mantendrá el gasto en Defensa (0,9%), protección del medio ambiente (0,9%), vivienda y servicios comunitarios (0,5%), Sanidad (6%), actividades recreativas, cultura y religión (1,1%), y Educación (4%).
Por el contrario, únicamente subirá el gasto en términos de PIB dedicado a protección social (del 16,6% del PIB al 16,8%), mientras que se reducirá el previsto para servicios públicos generales (5,4% del PIB, una décima menos), orden público y seguridad (1,9%, una décima menos) y asuntos económicos (3,7%, dos décimas menos)
