RSC.- En 2012 será obligatorio recoger el 25% de las pilas vendidas en la UE

Actualizado: miércoles, 3 mayo 2006 21:21


BRUSELAS, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La Unión Europea ha dado luz verde a una nueva normativa sobre recogida y reciclaje de pilas usadas que, entre otras cosas, obligará en 2102 a los Estados miembros a recoger el 25% de las pilas vendidas en la UE, porcentaje que se elevará al 45% en 2016.

La medida es fruto de un acuerdo alcanzado ayer entre el Parlamento Europeo (PE) y el Consejo y busca garantizar que las autoridades nacionales pongan en marcha planes de recogida y reciclaje de pilas y baterías para evitar su incineración. Los metales pesados que se encuentran entre sus componentes pueden causar problemas sanitarios y medioambientales si no se gestionan correctamente.

Sólo seis Estados miembros cuentan actualmente con planes de recogida de pilas y acumuladores, por lo que con la nueva legislación comunitaria se espera que estos programas se extiendan a los Veinticinco. Las autoridades nacionales deberán obligar a los fabricantes de estos materiales a poner en marcha programas de recolección y reciclaje de pilas y acumuladores. Además los productores deberán incorporar en el etiquetado de sus productos la capacidad y la duración de estos.

La nueva directiva señala que antes de 2012 se deberá recoger y reciclar como mínimo el 25 por ciento de las pilas vendidas en los últimos tres años mientras que en 2016 ese porcentaje tendrá que alcanzar 45 por ciento. Los puntos de recogida de pilas y baterías estarán disponibles en los barrios dos años después de la aplicación de la directiva, es decir en 2008.

En concreto, cuando la normativa se haga totalmente efectiva, los fabricantes deberán hacerse cargo del 50 por ciento de las pilas vendidas que no contienen cadmio o plomo, un 75 por ciento de las baterías que tienen cadmio y un 65 por ciento de las que llevan plomo. El Parlamento y el Consejo han acordado una regla de mínimos dejando a los Estados miembros la posibilidad de eximir a los pequeños productores de esta responsabilidad.

El marco legal aprobado también prohíbe la venta de pilas y acumuladores que contengan más de 0.0005 por ciento de mercurio y un 0.002 por ciento de cadmio, excepto para aquellos productos que vayan destinados a emergencias, sistemas de alarmas, equipamiento médico y herramientas eléctricas inalámbricas.

"Ahora tenemos que empezar a poner en marcha las disposiciones de la nueva directiva sobre las pilas y los acumuladores. Si empezamos cuanto antes la recogida y el reciclaje de pilas y baterías, el medioambiente se beneficiará con rapidez", señaló el comisario responsable de Medioambiente, Stavros Dimas.

Cada año se ponen a la venta en el mercado comunitario unas 800.000 toneladas de pilas y baterías de coches, 190.000 toneladas y acumuladores industriales y 160.000 toneladas de pilas y acumuladores portátiles, los más empleados por los consumidores.

Los metales que contienen las pilas y las baterías varían considerablemente ya que pueden incluir mercurio, plomo, cadmio, níquel, cobre, zinc, magnesio y litio. En caso de incineración estos metales contribuyen a las emisiones atmosféricas y contaminan los residuos de las incineraciones. Además al reciclar una pila se puede recuperar también toneladas de metales preciosos como el níquel, el cobalto y la plata.

Ahora el acuerdo alcanzado en el seno del comité de conciliación tiene que ser formalmente adoptado por el Parlamento y el Consejo, tras lo cual la directiva podrá ser publicada en el Boletín Oficial. Los Estados miembros tendrán entonces dos años para trasponer la directiva a sus legislaciones nacionales.

Seis Estados miembros cuentan ya con programas de recuperación: Bélgica con un 59 por ciento de recogida y reciclaje de las pilas vendidas, Suecia (55 por ciento), Austria (44 por ciento), Alemania (39 por ciento), Holanda (32 por ciento) y Francia (16 por ciento).