Actualizado 29/08/2006 21:21

RSC.- El director de AENOR dice que los objetivos en la aplicación de normas de calidad "no van de un día para otro"


LAREDO, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

El director de la Delegación en Cantabria de AENOR, Gerardo Pellón Cueto, señaló hoy que los modelos de gestión de calidad, como la norma ISO, "tienen un tiempo de desarrollo y madurez", y explicó que "depende de la proactividad del funcionario, de la persona que dirige ese departamento. Cuando los resultados sean buenos el ciudadano los verá a medio plazo y no van de un día para otro", afirmó.

Pellón intervino hoy en el seminario que sobre la gestión de la calidad en la Administración pública se celebra esta semana en Laredo, dentro de la oferta de cursos de verano de la Universidad de Cantabria.

Según explicó, de acuerdo con la experiencia que existe en la industria privada, los resultados de los sistemas de calidad en los que se encuentra eficiencia en cuanto a los productos y servicios de una empresa "se van viendo al cabo de un año desde que el sistema se ha implantado y certificado". "Antes sería factible, pero costaría mucho esfuerzo conseguir buenos resultados", precisó.

El director de la delegación explicó que AENOR forma parte del Comité Internacional de Normalización, así como del Comité Europeo, posee presencia en varios países como México, Chile, Italia, El Salvador y Portugal, y ha auditado empresas en otros países.

De esta estructura internacional, según su representante, la asociación extrae experiencias y modelos de otras partes para aplicar en Cantabria. "Hay modelos de la gestión privada que poco a poco se están aplicando en la Administración Pública. Es un reto importante que va a beneficiar a los ciudadanos, porque va a redundar en que no se pierdan papeles, que sea rápida y eficaz ", dijo.

Añadió que, a diferencia de la empresa privada, en este caso hay dos clientes. El primero es el interno, que es el propio funcionario, y el externo, que sería el ciudadano. "Si la norma está enfocada a una mejora del proceso interno, esto va a desembocar en que el cliente externo encuentre efectividad a la hora de recibir documentación, respuestas o ayudas por parte de la Administración", apuntó.

Pellón Cueto explicó también que AENOR está abierto a la certificación de todas las empresas que así lo deseen y que el procedimiento inicial es ponerse en contacto con esta Asociación. En este caso, un equipo auditor evalúa el sistema de gestión de la calidad conforme a los requisitos de la norma ISO 9000.

Las disconformidades se reflejan en un informe que luego se presenta a los directivos de esa empresa. Después se da un tiempo para que acometan reformas y, finalmente, se evalúa un nuevo informe de auditoria con las correcciones y si el caso procede se otorga el certificado de AENOR.