LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un total de 25 empleados de la Fundación 'La Caixa' plantaron este fin de semana 50 ejemplares de monteverde en la finca de Osorio, en el municipio grancanario de Teror, en el marco del proyecto 'Jornadas de empresa', organizadas por la Fundación Canaria para la Reforestación (Foresta), que celebra este año su décimo aniversario trabajando por la conservación y mejora del patrimonio natural de Canarias.
La iniciativa fue puesta en marcha por la Fundación Foresta con el ánimo de ofrecer a las empresas canarias la opción de trabajar por la protección del entorno natural de las islas y compensar, así, las acciones contaminantes derivadas de su actividad empresarial, informó la entidad en un comunicado.
Dicha actividad cuenta con el apoyo del Cabildo de Gran Canaria y "está logrando, gracias a la implicación de entidades como Fundación 'la Caixa', reforestar importantes extensiones de hectáreas dañadas o en riesgo de desertización", agrega el comunicado.
Foresta ideó dichas jornadas como respuesta a la necesidad de las empresas de "conciliar su actividad industrial con el respeto al medio ambiente". De hecho, indica que por primera vez en Canarias "una fundación ofrece de forma regular e integrada en un programa estable, un servicio de acción para el cuidado y la protección del entorno natural".
En este sentido, el certificado que se entrega a los participantes y entidades al finalizar el programa acredita no sólo su implicación en el cuidado del entorno natural, sino "su incorporación al grupo de empresas solidarias que contribuyen a hacer realidad el desarrollo sostenible para Canarias", añade.
Airvén, Fundación Satocan Junguel Sanjuán y ahora Fundación 'La Caixa' configuran el historial de un proyecto que comenzó como experiencia piloto y se ha consolidado como una iniciativa de futuro en el programa anual Foresta gracias a la respuesta positiva de empresarios y voluntarios.
La Fundación Foresta que este año cumple su décimo aniversario de actividad por la mejora del entorno natural del archipiélago, ha repoblado desde su nacimiento más de 250 hectáreas de monte, incluyendo fincas agrícolas privadas y terrenos municipales extendidos por toda la geografía insular.
