MADRID, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Natura, con el respaldo de la Fundación La Caixa, está llevando a cabo una campaña de sensibilización en la localidad catalana de Sitges que, bajo el lema 'No me tires la caña', informa sobre el consumo responsable de pescado respetando las tallas reglamentarias.
El primero de los actos de concienciación tuvo lugar el pasado 28 de julio, con un espectáculo de un mimo en la playa de la Fragata. El mimo facilitó información sobre la problemática que genera la pesca y el consumo de peces que no han llegado a las tallas mínimas de pesca para asegurar su supervivencia en la zona.
Para respaldar esta iniciativa, la ONG difundió posteriormente pegatinas, carteles, posavasos y pizarras entre los restaurantes, bares, chiringuitos y tiendas de Sitges así como en los Puertos de Aiguadolç y Ginesta, las oficinas de Turismo de Sitges y el Ayuntamiento de la localidad.
Precisamente el Ayuntamiento del municipio junto con el Gremio de Hostelería de Sitges, el Puerto de Aiguadolç, el Puerto Ginesta y la Cofradía de Pescadores de Sitges colaboran en la difusión de la campaña.
AREA PROTEGIDA DEL GARRAF
Por otro lado, la ONG también está presionando para crear una reserva marina frente las costas del Garraf, en la provincia de Barcelona, que permita proteger y restaurar la biodiversidad de los prados submarinos de posidonia, una planta marina que sólo crece en el Mediterráneo.
En este sentido, la Fundación La Caixa concedió en 2004 una subvención a la ONG para que trabajara en la creación de esta reserva, ya que los fondos marinos están experimentando un deterioro constante debido a la contaminación del agua procedente del río Llobregat, la sobrepesca, la pesca de arrastre, las obras de la costa, las extracciones de arena para las regeneraciones de playas, el fondeo de embarcaciones de ocio y el uso de redes de deriva.
Tanto la iniciativa 'No me tires la caña' como los trabajos en la creación de la reserva marina se están llevando a cabo con el objetivo recordar que los recursos marinos "son finitos" y que la presión humana --construcción indiscriminada en el litoral, sobreexplotación de la pesca y contaminación, entre otras causas-- está degradando los ecosistemas, según afirma la ONG.
