Actualizado 20/02/2006 19:41

RSC.- La minera Newmont accede a pagar 25 millones de euros a Indonesia por contaminación por mercurio y arsénico

La empresa responde con estudios 'independientes', pero comunidades local afectadas señalan que éstos "están pagados por la compañía"


MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

La minera estadounidense Newmont Corporation, dedicada principalmente a la extracción de oro y metales preciosos, aceptó hace unos días pagar un total de 30 millones de dólares (unos 25 millones de euros) a Indonesia tras la celebración de una vista civil en la que el Gobierno argumentó que la empresa había contaminado una de las bahías más importantes del país con arsénico y mercurio procedente de sus actividades extractivas.

Según recoge hoy el diario 'The New York Times', el establecimiento de esta multa que la compañía debe abonar al país es independiente del juicio que por la vía penal se sigue contra la empresa y su dirección indonesia y que actualmente está en marcha en la provincia de Sulawesi del Norte, según informaron funcionarios del Gobierno.

Según los términos del 'acuerdo de buena voluntad' alcanzado, el Gobierno indonesio estableció un juicio por valor de 135 millones de dólares contra Newmont que se inició el pasado año, después de que los habitantes cercanos a la mina de Bahía Buyat, en Sulawesi del Norte, denunciaran la aparición de tumores, erupciones y otras enfermedades que, según ellos, fueron causados por los residuos de la mina de oro de la empresa.

Según este acuerdo civil, el Gobierno no acusará directamente de contaminación a la empresa y no señalará si la mina de la empresa, que se deshacía de sus residuos a través de una tubería de aguas sucias, contaminó la bahía. La empresa por su parte, niega que deba hacerse cargo de los gastos de esta contaminación.

La única referencia a la contaminación en este acuerdo señala que aunque Newmont mantenga que sus operaciones no causaron la contaminación ambiental, ambas partes reconocen que cada una de ellas "ha expresado en este sentido puntos de vista diferentes".

Según señala el diputado y asesor del ministro de finanzas y asuntos económicos, Mahendra Siregar, la cuestión de la contaminación "no era el foco central de este acuerdo". "Preferimos que las referencias al delito de contaminación queden reservadas al proceso criminal, donde aparece especificado que el Gobierno denunció a la empresa por depositar residuos contaminados por materiales pesados en las aguas de la bahía", afirma Siregar.

La importancia de este acuerdo para Newmont, --una de las empresas mineras más importantes del mundo, con operaciones en Estados Unidos, Africa y Latinoamérica--, se evidenció con la presencia y el anuncio de éste por parte de su director ejecutivo, Wayne Murdy, quien voló desde Denver, sede la empresa, a Yakarta de urgencia para hacer pública esta decisión.

La compañía opera en una amplia zona de la isla indonesia de Sumbawa, donde posee una mina de extracción de cobre, además de la mina de oro de Buyat Bay, que fue clausurada en 2004, después de ocho años de operaciones, y que supuso también el traslado de muchos de los aldeanos que dejaron la zona alegando temor a verse afectados en su salud por la contaminación tóxica derivada de las operaciones de la compañía.

EVIDENCIAS CIENTIFICAS

La mina de Buyat Bay fue objeto de una auditoría interna de la empresa en 2001, donde se demostró que toneladas de emisiones tóxicas de vapor de mercurio eran expulsadas al aire tras producirse un fallo en un dispositivo de control. La empresa negó este extremo en aquella ocasión, asegurando que esos vapores no eran perjudiciales ni para el entorno ni para la salud humana. Ni este acuerdo ni el proceso penal ha resuelto aún estos escapes.

Según adelantó el vicepresidente de Operaciones de Newmont para Indonesia y Australia, Robert Gallagher, el acuerdo alcanzado incluye la garantía de crear un equipo de seis científicos que analice y controle desde el punto de vista medioambiental las emisiones de la mina en los próximos diez años. Un total de 30 millones de dólares (25 millones de euso) se destinarán durante la próxima década a la supervisión y desarrollo de las comunidades locales que habitan en Sulawesi del Norte.

Gallagher también insistió en que el acuerdo es "totalmente independiente" del proceso criminal, confiando en que los estudios científicos de la empresa "nos entorpezcan el desarrollo del juicio".

Según datos de un estudio de 2004 del Ministerio de Medio Ambiente indonesio, los residuos de la mina de oro abandonados presentaban altos niveles de arsénico y mercurio que se depositaron como sedimento en el suelo de la bahía y que después pasaron a organismos inferior que alimentaron otras especies, como los 'benthos', que proporcionan alimento al pescado. Newmont niega que este arsénico pasara a la cadena alimenticia y defiende que se trata de un tipo de producto que "no se disuelve en el agua".

Así lo afirman datos de estudios de científicos que la compañía señala como 'independientes', pero que las comunidades locales afectadas insisten en calificar de "interesados" porque se trata de estudios "pagados por la propia empresa". Según Mahendra, que colaboró en alcanzar este acuerdo, "se trata de una gran victoria para los habitantes locales". "Las personas y el Medio Ambiente son los ganadores, nadie más", concluyó.