RSC.- La nuevas tecnologías pueden hacer de los lugares de trabajo espacios más ecológicos, evitando el uso del papel

Actualizado: miércoles, 4 enero 2006 19:42

Las resinas, lacas, tintes, disolventes y cloros para blanquear son productos altamente tóxicos y su exposición puede provocar cáncer


MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

"Mire a su alrededor su lugar de trabajo y probablemente encontrará mucho material impreso, tarjetas de visita, folletos o libros". "La impresión de palabras e imágenes sobre el papel puede parecer una de las cosas más ecológicas que su empresa hace, pero eso no es necesariamente cierto", advierte el Boletín 'Green Business' en su última edición semanal.

"Si usted examina el ciclo de vida de estos materiales y todo el proceso hasta pasar a convertirse de árboles en papel, además de las sustancias químicas que se le añaden, y presentes en cualquier oficina, de cualquier profesional, de cualquier empresa, toman un matiz "decididamente anti-ecológico".

La explosión de la 'era digital', las páginas web y el formato electrónico "están haciendo que las cosas cambien mucho" y que las prácticas administrativas de las empresas, grandes y pequeñas, sean mucho más 'verdes' y se basen en el ahorro del papel y la sustitución por formatos menos perjudiciales para la deforestación de los bosques. Las empresas del sector editorial se han sumado también a estas nuevas tendencias.

Además de estas prácticas 'verdes' en las empresas, las grandes compañías, y recientemente hasta las Administraciones públicas, optan también por este tipo de formatos y por la compra responsable y ecológica de sus bienes y servicios. Asimismo, y con el crecimiento de la demanda de la 'impresión verde', se ha multiplicado también el número de compañías del sector editorial que ofrecen productos y un uso del papel mucho más eficiente y ecológico.

Las máquinas de impresión mecánicas utilizadas en el sector han cambiado mucho en el último medio siglo. La litografía, y sus métodos típicos para imprimir libros, revistas o catálogos han variado sus procesos, las tintas, los disolventes, los ácidos, las resinas, las lacas, los tintes, los barnices y otras soluciones. Tan sólo algunos de estos ingredientes terminan directamente en las páginas impresas.

Muchos de estos ingredientes son tóxicos y si no se sustituyen, los empleados de estas empresas y los usuarios de estos productos impresos pueden estar expuestos a muchos de ellos: cromo, cadmio, cloruro de metileno, pigmentos a base de bario, o pigmentos acrílicos perjudiciales.

"Y eso no es todo; el blanqueo del papel utilizando cloro se une al resto de agentes contaminantes del agua y puede llegar a causar cáncer", advierte el Boletín. Además, los pegamentos y bolsas de plástico usadas en la impresión o el embalaje posterior del material impreso pueden provocar que, después de un tiempo, el papel llegue a ser imposible de reciclar.

QUÉ PODEMOS HACER

Aunque no existen unos 'estándares oficiales' sobre cómo evitar el uso y la exposición a este tipo de productos y conseguir una impresión 'más verde', en general, una editorial dedicada a la elaboración de publicaciones que desee ser ecológica y responsable deberá utilizar papel amigable con el Medio Ambiente, reducir o eliminar las sustancias químicas tóxicas en tintas y solventes y proporcionar condiciones de trabajo seguras para sus empleados, incluyendo la incorporación de sistemas de filtración de aire más avanzados.

Entre las cuestiones a las que deben dar respuesta las empresas de este sector se encuentra algunas como '¿pueden ser editados todos sus trabajos en papel con el máximo de fibras recicladas?'. Sería importante que las empresas especificaran que esto es así o al menos lo es en el 50% de los contenidos que publican.

Otra de estas cuestiones pasa por plantearse si las tintas con las que se imprimen estas obras poseen un grado bajo de contaminantes. En el caso de las rotativas de los diarios el 90% de ellos se imprimen con tinta vegetales, que son usadas rutinariamente para las litografías. "Evite las tintas que contienen metales pesados como el cromo, el plomo, el cadmio, o el mercurio, que se usan comúnmente para producir algunos colores brillantes", recomienda 'Green Business'.

"Las capas, laminados, tintas, hojas de metal, pegamentos, etiquetas, y la selección del tipo de papel pueden afectar al reciclado de un documento impreso", agrega. "Una editorial debería ser capaz de encontrar modos alternativos de conseguir el efecto deseado" (por ejemplo, con tamaños innovadores de papel, nuevos tipos de colas que no entorpezcan el reciclaje, etc).

Como con tantos productos 'verdes', elegir este tipo de productos, también en los libros y material impreso es "la mejor decisión que se puede tomar", e incluso decidir no utilizar ni adquirir ningún documento en soporte papel en absoluto, porque muchas veces las empresas pueden ofrecer la misma información en formato 'on line' y ponerla al día es siempre más barato, más rápido y por supuesto más ecológico.

"Tal vez una invitación para acudir al sitio web de esas empresas sería más eficaz que un folleto que terminará en la basura", agrega el Boletín.