Actualizado 19/10/2006 20:39

RSC.- PNUMA y Fundación Nipona conceden el Premio ambiental Sasakawa al colombiano Rodrigo Vivas y al Grupo Tenadi

El galardón reconoce los esfuerzos de los premiados en su lucha contra la desertificación y la degradación ambiental


MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Fundación Nipona concedieron el Premio Sasakawa al colombiano Rodrigo Vivas Rosas y al Grupo Cooperativa Tenadi, de Mauritania, en reconocimiento por "sus ideas innovadoras e iniciativas extraordinarias en Materia de Medio Ambiente". El premio será entregado el próximo día 30 en Nueva York.

De este modo, el Jurado del Premio reconoce los esfuerzos de los galardonados "en el combate a la desertificación y la degradación ambiental, un problema local y global de máxima importancia que amenaza las vidas y medios de vida de dos billones de personas que habitan las áreas secas y áridas del planeta".

En el caso de Vivas, este abogado ambientalista y líder del Consorcio para la Agricultura Sostenible (CIPASLA por sus siglas en inglés) --una alianza entre 12 organizaciones y cerca de 6.500 personas que viven en un área de 7.000 hectáreas, que abarca 23 distritos rurales-- ha desarrollado soluciones técnicamente viables y ambientalmente sustentables sobre el uso del agua, especialmente el agua de lluvia.

Sus actividades se extienden por toda la región andina y sus proyectos han posibilitado la creación de condiciones para la lucha contra la pobreza, en un contexto marcado por el conflicto armado, la producción de cultivos ilícitos y el flujo de migrantes a las ciudades colombianas.

"Estoy muy complacido de obtener este reconocimiento que es muy significativo y motivador para mi trabajo personal y para nuestra organización", señaló Vivas al conocer la noticia. "Siempre he pensado que podemos replicar iniciativas de desarrollo sostenible en Colombia", indicó.

COMBATIR LA DESERTIFICACION

Por su parte, el Grupo Cooperativa Tenadi ha desarrollado una serie de técnicas innovadoras para combatir la desertificación ya que, desde 1973, Mauritania sufre una sequía persistente que ha acabado con el 90 por ciento del ganado y ha generado un éxodo de los pueblos nómadas de la zona.

Gracias a Tenadi se han llevado a cabo perforaciones para mejorar y reforestar un área de 80 hectáreas para detener el movimiento de las dunas; y se ha creado un oasis de palmeras de dátiles que alberga el cultivo de diversas plantas, entre otras acciones. Estos proyectos también benefician a una gran cantidad de familias que reciben formación en técnicas agrícolas.

En palabras del subsecretario general de las Naciones Unidas y director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner, este premio es "una condecoración para los literalmente cientos de miles de iniciativas de comunidades rurales que intentan conservar la salud y la fertilidad de la tierra en algunos de los ambientes más ásperos en el globo".

"La desertificación y la degradación de la tierra es un problema ciertamente aterrador con consecuencias de amplio alcance, desde la pérdida de tierra productiva, el incremento de emisiones de gases invernadero de suelos degradados, hasta el enlodamiento de ríos y presas hidroeléctricas", prosigue Steiner en su discurso.

"Mayores cargas de sedimento en los ríos pueden a su vez dañar la pesca y obstruir sistemas costeros económicamente importantes como los arrecifes de coral y los lechos de pasto marinos. La desertificación tiene así impactos de amplio alcance sobre nuestros intentos globales por reducir la pobreza y alcanzar las Metas de Desarrollo del Milenio, internacionalmente acordadas", concluyó.