RSC.-"Todavía hay un núcleo machista duro" que rechaza a la mujer en puestos de responsabilidad, según director del CIS

Actualizado: viernes, 25 abril 2008 21:21

GIJÓN, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -

El director del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), Fernando Vallespín, señaló hoy que "todavía hay un núcleo machista duro" en la sociedad española como lo demuestra que entre las razones dadas por los encuestados haya quien opine que no siempre están preparadas para asumir una responsabilidad. Esta es la cuarta razón por detrás de las siguientes: que dispone de menos tiempo debido a las cargas familiares, que no se confía suficiente en ellas y que se sigue dudando de su capacidad.

Así lo dijo durante su participación en el Seminario Europeo sobre el Empleo 'La hora de la mujer', organizado por la Asociación de Periodistas Europeos en la Escuela de Hostelería de Gijón. Pese a todo, indicó que existe un aumento claro del interés de la población a favor de la igualdad entre hombres y mujeres.

Para Vallespín, el avance en la percepción de la desigualdad de la mujer es una noticia "bastante positiva", aunque lamentó que ahora parezca que la sociedad se da por contenta con lo que se ha logrado.

Además, indicó que donde se percibe más desigualdad es, después de en los salarios, en el ámbito de la conciliación de la vida laboral y familiar. A esto se une la dificultad de acceso a puestos de responsabilidad tanto en el ámbito empresarial como en el público. Por contra, apuntó que dentro de la percepción que se tiene sobre las medidas aplicadas para favorecer la igualdad, la que más apoyos recibe es la de la flexibilización de horarios.

Según él, los dos grandes cambios que se han dado en España en los últimos años son el aumento de la inmigración y el cambio de papel de la mujer en la sociedad. También indicó que el 60 por ciento de los estudiantes son mujeres, por lo que no se aprecia un problema de igualdad en el ámbito educativo pero sí en otros.

En cuanto a la conciliación de la vida laboral y familiar, señaló que de los encuestados un 46,6 por ciento de los hombres y un 40 por ciento en el caso de las mujeres piensa que es un tema privado de organización domésticas entre hombres y mujeres y que de poco sirve que intervengan las instituciones. No obstante, un 38 por ciento del total de los encuestados no está de acuerdo con esa afirmación.

Para Vallespín, se trata más de un problema cultural que se asienta en una "jerarquización machista". Por este motivo, apostó por la transmisión de valores tanto a través de las instituciones como de los medios de comunicación.

NATALIDAD

Por otro lado, citó el tema de la natalidad, con diferencias entre España y el resto de Europa en lo que se refiere a la edad media del primer hijo. Una edad que en el caso español es, según él, "considerablemente más tardía". De hecho, señaló que de los 28,2 años de media en 1980 se pasó a los 30,9 en 2006, motivado sobre todo por la dificultad de compatibilizar el trabajo y la vida familiar.

A este respecto, apuntó que el repunte de la natalidad en España es propiciado sobre todo por la población inmigrante. Pese a ello, enfatizó el hecho de que las mujeres inmigrantes a medida que se integran en el país se adaptan a la media de fecundidad española. Vallespín lo atribuyó a que el problema depende de la propia estructura social y no tanto a una influencia cultural.

Asimismo, un 38 por ciento considera que tener hijos es un obstáculo para la vida profesional de las mujeres, un porcentaje que en el caso de los hombres es sólo de un 3,9 por ciento. También destacó que hay mujeres que limitan su promoción profesional para el cuidado de los hijos mientras que un 14,1 por ciento dejó de trabajar definitivamente.

DIFERENCIA SALARIAL.

A la conciliación de la vida laboral y familiar se refirió también la directora del Instituto Asturiano de la Mujer, María Campomanes, quien resaltó en su intervención que, según los últimos estudios, el salario de la mujer es un 20 por ciento menos al de los hombres, con una diferencia de 1,99 euros por salario/hora.

Campomanes indicó que las mujeres también emplean más del doble de tiempo que los hombres en las tareas domésticas y un 81 por ciento más en lo que se refiere al cuidado de los mayores. Además, el 86 por ciento de las familias monoparentales están encabezadas por mujeres.

También señaló que el 77,6 por ciento de las amas de casa de entre 30 y 40 años desean tener un trabajo remunerado, un interés que crece con la renta, por lo que no está ligado a la necesidad económica.

Además, apuntó que, según los estudios realizados, el 65 por ciento de la población está conforme con pagar más impuestos para que se den más apoyos a las familias. Por contra, un porcentaje de empresas creen que la conciliación laboral y familiar debe hacerse de forma privada y otro piensa que la responsabilidad familiar limita el rendimiento de las mujeres.

Todos estos problemas generan en la mujer, en su opinión, frustración, sentimientos de mala madre, limitación del desarrollo profesional, peor calidad de vida y menos tiempo para el ocio o para sí mismas.

Campomanes abogó, frente al hacer uso de guarderías 12 horas diarias o "esclavizar" a las abuelas, introducir la "humanización" de las jornadas laborales, a lo que pueden contribuir las nuevas tecnologías.

Respecto al papel del hombre, animó a la población masculina a que asuma su responsabilidad en las tareas domésticas, el cuidado de los mayores y de los hijos y a que "se cuiden ellos solos", apostilló. Para ella, la igualdad es "un derecho universal vinculado con el ejercicio de la ciudadanía y que reportará beneficios a todos".