MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, considera que, "a lo mejor", los taxistas deberían dirigir sus protestas a la sede del PSOE, situada en la calle Ferraz de Madrid, o a la del Ministerio de Fomento.
La dirigente popular ha asegurado que su formación no cederá al "chantaje" después de diez días de huelga de los taxistas y ha indicado que el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, tiene competencia "en control, ordenación y regulación administrativa de los servicios de transporte".
"Y lleva diez días sin aparecer, sin hacer uso de sus competencias y escurriendo el bulto", indicó en declaraciones a Telemadrid, recogidas por Europa Press. El ministro comparece este jueves en el Congreso para informar de este asunto.
En opinión de Levy, el Gobierno está dejando que Madrid esté "secuestrada" y "tomada por los taxistas" sin que los ciudadanos puedan circular con "total tranquilidad".
Levy ha insistido en que el Gobierno socialista de Pedro Sánchez está haciendo "dejación de funciones" y ha señalado que la competencia debería "ser otra vez estatal".
"A lo mejor las manifestaciones deberían ir a Ferraz y al Ministerio de Fomento porque ahí hay competencias", ha dicho, después de dos jornadas de protestas de los taxistas delante de la sede del PP.
Ante el hecho de que las protestas se estén personalizando en la figura del presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, Levy ha indicado que Garrido está reivindicando unos principios de libertad, no "aguantando la presión", porque no se puede convertir Madrid "en una isla" fuera de la tecnología que "está moviendo el mundo" y es "aplicable en todas partes".
De hecho, ha señalado que, en comparación con otros países, en España hay "menor presencia de vehículos VTC", por lo que hay "margen para la convivencia" con los taxis. En su opinión, para lo que "no hay margen" es "para el chantaje y la violencia" haciendo "rehenes" a los ciudadanos.
Por eso, ha insistido en que el PP no va a "ceder ante chantajes" sino que apoyará "todas aquellas medidas para favorecer la convivencia de ambos sectores". Se trata, ha dicho, de apostar por la liberalización del sector del taxi y que puedan competir en "igualdad de condiciones".
