El Banco de España advierte de que la economía continuó deteriorándose en el cuarto trimestre

Actualizado: martes, 30 diciembre 2008 14:45


MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Banco de España advirtió hoy de que la economía española continuó deteriorándose en el cuarto trimestre del año, después de la "muy acusada desaceleración" que experimentó el PIB en el tercer trimestre, con un descenso intertrimestral del 0,2%, frente al avance del 0,1% del segundo trimestre, y una caída interanual de nueve décimas, hasta el 0,9%.

Si esto sucede y finalmente el crecimiento del cuarto trimestre es peor que el del tercero, la economía española entraría en recesión en 2008, tras registrar dos trimestres seguidos de crecimiento negativo y como ya ha ocurrido en otros países como Alemania o Reino Unido.

En su boletín económico de diciembre, la institución gobernada por Miguel Ángel Fernández Ordóñez afirmó que el retroceso de la inversión en bienes de equipo se ha "intensificado" en la última parte del año por la debilidad de la demanda, y todo ello "en un contexto en el que la evolución de las condiciones de financiación está contribuyendo a desalentar los procesos de gasto empresarial".

Asimismo, el Banco de España asegura que los indicadores referidos a la inversión en construcción mostraron una "contracción adicional" de la actividad, sobre todo en el empleo, mientras que los indicadores del turismo receptor se caracterizaron en noviembre por su "evolución desfavorable".

El Banco emisor refleja también el retroceso de las exportaciones de bienes en octubre y el "acusado descenso" de las importaciones en el mismo mes, que llevaron a una "intensa corrección del déficit comercial como consecuencia de la "sustancial mejora" del déficit no energético.

En este sentido, la institución alerta de que las variaciones en la competitividad-precio siguen teniendo una "influencia significativa" en el comportamiento de las exportaciones, a pesar del paulatino desplazamiento que han registrado hacia segmentos de mayor calidad y contenido tecnológico. Por este motivo, subraya la importancia de mantener un crecimiento de costes y precios por debajo de los de los competidores para ampliar el acceso de los productos españoles a los mercados internacionales.

Sin embargo, el Banco de España considera que, pese a la debilidad de la demanda internacional, la aportación de la demanda exterior al crecimiento del PIB en España registrará una "notable mejoría" en este ejercicio.

Desde el punto de vista de la oferta, afirma que los indicadores disponibles referidos al sector industrial reflejan un "empeoramiento adicional" de la actividad en el sector durante el cuarto trimestre que afectó a todos los tipos de bienes (de equipo, intermedios y de consumo), que registraron tasas negativas de forma generalizada en octubre.

LOS SERVICIOS TAMBIÉN PIERDEN DINAMISMO

En cuanto a los servicios de mercado, el Banco de España señala que la información coyuntural disponible apunta también a una pérdida de dinamismo que se refleja en el empleo que genera el sector y en su indicador de confianza, que retrocedió "fuertemente" en noviembre tras experimentar una leve mejoría en el mes de octubre.

Por otro lado, la institución gobernada por Miguel Ángel Fernández Ordóñez asegura también que los últimos indicadores del mercado de trabajo reflejan una intensificación del deterioro que ha sufrido en los últimos meses, debido al retroceso de las afiliaciones y al incremento del paro registrado en el mes de noviembre.

DÉFICIT "NOTABLEMENTE MÁS ELEVADO"

Respecto al déficit del Estado, el Banco de España destaca la nueva cifra registrada hasta el mes de noviembre y asegura que las cifras que se han registrado a lo largo de 2008 apuntan a un cierre del año con un déficit "notablemente más elevado" que el presentado en los Presupuestos de 2009.

En concreto, se refiere a la "fuerte caída de ingresos" registrada hasta noviembre y la achaca a la debilidad del IRPF y a los "elevados retrocesos" en el Impuesto de Sociedades y el IVA, atribuibles, a su parecer, a la repercusión del ciclo económico y en parte a las medidas discrecionales del Gobierno, como la deducción de 400 euros en el IRPF, el método de cálculo de los pagos fraccionados de Sociedades, las reformas de 2007 y el efecto del régimen de grupos en el IVA.

En cuanto a los precios, el Banco de España se hace eco de el último descenso del IPC hasta el 2,4% en tasa interanual, así como de la reducción del IPC armonizado y la rebaja del diferencial de precios hasta 0,3 puntos, el valor más bajo desde el inicio de la Unión Económica y Monetaria. Asimismo, se refiere al recorte de los precios industriales y al aumento de los precios de las exportaciones en los últimos meses del año.

Por todo lo anterior, el Banco emisor estima que la "fuerte desaceleración" de la demanda final en la economía española y el efecto negativo que han empezado a tener las condiciones de financiación y el deterioro de las expectativas permiten avanzar menores crecimientos de la inversión productiva en los próximos trimestres, prolongando así la trayectoria de desaceleración de los últimos meses.

SE SIGUE DESACELERANDO LA FINANCIACIÓN

En el ámbito financiero, la institución asegura que durante noviembre y la parte transcurrida de diciembre, la evolución de los mercados financieros nacionales e internacionales continuó estando condicionada por la preocupación por el crecimiento económico y el desarrollo del episodio de crisis que se vive en estos momentos.

De acuerdo con los datos más recientes sobre los balances del sector privado, el Banco de España afirma que prosiguió la desaceleración de la financiación captada por las sociedades y los hogares, aunque de forma "más acusada" en los hogares, al tiempo que los ritmos de expansión de sus activos líquidos experimentaron escasas variaciones.

Además, la información provisional del mes de noviembre apunta a nuevos descensos en las tasas de crecimiento de la deuda de las empresas y las familias y a un mantenimiento del dinamismo de sus activos líquidos.

Finalmente, el Banco de España recuerda que los fondos destinados a financiar la adquisición de vivienda se desaceleraron hasta el tercer trimestre de 2008, mientras que los otorgados para consumo y otros fines crecieron a un ritmo sostenido y los concedidos a sociedades no financieras se aceleraron.