MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Industria y los sindicatos CC.OO. y UGT han pedido a la multinacional Cemex que reconsidere su anunciado cierre de dos de las siete fábricas de cemento que tiene en España y el ERE presentado para los alrededor de 300 trabajadores que suman estas instalaciones con el fin de buscar otras opciones.
La multinacional mexicana rechazó replantearse los cierres, si bien se comprometió a dar una respuesta definitiva en los dos próximos días, según informaron a Europa Press en fuentes sindicales.
Así se puso de manifiesto en la reunión mantenida en la tarde este miércoles en la sede del Ministerio, a la que asistieron su titular, Reyes Maroto, el secretario general de Industria y de la Pequeña Empresa, Raúl Blanco, los consejeros del ramo de Andalucía y Baleares, y representantes de la compañía y de los sindicatos.
En la misma línea, el conseller de Trabajo, Comercio e Industria del Govern balear, Iago Negueruela, indicó tras el encuentro que la cementera "no está por la labor" de abordar una negociación antes del ERE, pero que consultará a su matriz europea antes de dar la respuesta definitiva.
De esta forma, todo apunta a que Cemex arrancará el preceptivo periodo de consultas con los sindicatos sobre el ERE planteado para toda la plantilla de las dos fábricas, que suman entre 200 y 300 trabajadores. La primera reunión está prevista para el próximo 7 de noviembre, según indicaron en dichas fuentes sindicales.
"Las razones que expone la empresa son contradictorias con su supuesto interés de mantenimiento de la actividad industrial en nuestro país", denunció CC.OO al término de la reunión. "Es una muestra clara de que la supuesta responsabilidad social empresarial es solo una cuestión de maquillaje de la compañía de cara a sus potenciales clientes", añadió el sindicato en un comunicado.
NUEVO AJUSTE.
Cemex anunció el pasado mes de octubre el cierre de dos de las siete fábricas de cemento que tiene en España, la Gádor, en Almería, y de Lloseta, en Baleares.
Los cierres se enmarcan en un ajuste mayor del grupo en España que implica también el cierre de otros centros de trabajo, de determinadas oficinas comerciales y a las oficinas corporativas centrales.
Cemex, que según fuentes del sector emplea en España a un total de 1.000 trabajadores, atribuyó este nuevo ajuste en el país a la actual coyuntura del sector de la construcción, especialmente de grandes infraestructuras, y a la nueva regulación sobre derechos de emisión de CO2 que entrará en vigor en Europa en 2020.
Con las medidas anunciadas, la compañía aspira a "asegurar el mantenimiento de su actividad en España y su presencia en los distintos mercados en los que viene operando".
Cemex aborda este ajuste cinco años después de que en los años 2012 y 2013, en plena crisis, acometiera su última reestructuración en el país, que supuso dos EREs que afectaron a 280 y 156 trabajadores, respectivamente y la venta a Cementos Molins de una fábrica de cemento de Barcelona. Unos meses después, la compañía anunció un acuerdo a escala europea con la suiza Holcim.
La presencia industrial de Cemex en España se completa con las fábricas que tiene en Alicante, Buñol (Valencia), Castillejo (Toledo) , Alcanar (Tarragona) y Morata de Jalón (Zaragoza), instalaciones que, en principio, no se ven afectadas.
