COMUNICADO: Rocket Lab llega al espacio con éxito

Publicado: jueves, 25 mayo 2017 16:08

HUNTINGTON BEACH, California y AUCKLAND, Nueva Zelanda, 25 de mayo de 2017 /PRNewswire/ -- Rocket Lab [https://www.rocketlabusa.com/], una empresa aeroespacial americana y neozelandesa, abrió brecha hoy cuando su cohete Electron alcanzó el espacio a las 16:23 NZST.

Electron despegó a las 16:20 NZST desde el Complejo de Lanzamiento 1 de Rocket Lab en la Península Mahia situada en Nueva Zelanda. Ha sido el primer cohete orbital del mundo lanzado desde un complejo de lanzamiento privado.

"Ha sido un día increíble y estoy muy orgulloso de nuestro gran equipo," ha dicho Peter Beck, CEO y fundador de Rocket Lab. "Somos uno de las pocas empresas en desarrollar un cohete desde cero y lo hemos hecho en menos de cuatro años. Hemos trabajado infatigablemente para llegar a este momento. Hemos desarrollado todo internamente y construido el primer complejo de lanzamientos orbitales en el mundo, y todo con un pequeño equipo.

"El vuelo ha sido espectacular. Tuvimos una primera etapa de ignición, etapa de separación, ignición de la segunda etapa y separación de la cofia fantásticas. No llegamos a alcanzar una órbita por poco e investigaremos las razones de ese fallo, pero llegar al espacio en la primera prueba nos coloca en una óptima posición para poder agilizar la fase comercial de nuestro programa, transportar a nuestros clientes a órbita y abrir el espacio al comercio," comentó Beck.

En las próximas semanas, los ingenieros de Rocket Lab en Los Ángeles y Auckland, Nueva Zelanda, analizarán los 25.000 canales de datos recogidos en el vuelo de prueba. Los resultados de ese análisis conformarán las medidas a adoptar para optimizar el cohete.

"Hemos aprendido mucho de este lanzamiento y aprenderemos aún más en las próximas semanas. Apostamos por facilitar el acceso al espacio y éste es un hito en ese proceso. Las aplicaciones comerciales que esto generará son infinitas, entre ellas, las que ya conocemos, por ejemplo: informes meteorológicos mejorados, Internet desde el espacio, predicción de desastres naturales, datos marítimos actualizados y servicios de búsqueda y rescate.," afirmó Beck.

El lanzamiento de hoy ha sido el primero de tres vuelos de prueba programados para este año. Los objetivos que se plantea Rocket Lab para la segunda prueba son alcanzar una órbita y ampliar la carga útil de los cohetes.

A pleno rendimiento, Rocket Lab espera poder lanzar más de 50 cohetes al año y tiene permiso para efectuar hasta 120 lanzamientos al año. Esto contrasta considerablemente con los 22 lanzamientos efectuados el año pasado en Estados Unidos y 82 en el resto del mundo.

La fase comercial de Rocket Lab le llevará a prestar sus servicios a sus actuales clientes, incluyendo a la NASA, Spire, Planet, Moon Express y Spaceflight.

El vídeo e imágenes del lanzamiento están disponibles en el siguiente enlace:https://www.rocketlabusa.com/latest/link-to-rocket-lab-image... [https://www.rocketlabusa.com/latest/link-to-rocket-lab-image...]

Contacto para medios de comunicación:Catherine Moreau Hammond | 027 538 9039 | c.moreauhammond@rocketlab.co.nz[mailto:c.moreauhammond@rocketlab.co.nz]Chloe Tonkin | 020 414 30668 | chloet@porternovelli.kiwi[mailto:chloet@porternovelli.kiwi]Marcus Torrey | +1 (415) 891-4909 | marcus@methodcommunications.com[mailto:marcus@methodcommunications.com]

Sobre Rocket Lab

La misión de Rocket Lab es suprimir los obstáculos que impiden hacer un uso comercial del espacio por medio de lanzamientos numerosos a una baja órbita terrestre. Desde su fundación en el 2006 por Peter Beck, Rocket Lab ha creado una gama de sistemas de cohetes completos y la tecnología para el transporte rápido y económico de cargas útiles

Aparte del complejo de lanzamiento a órbita en la Península Mahia, el primero en Nueva Zelanda, la empresa también tiene instalaciones en Auckland y Los Ángeles.

Rocket Lab es una empresa privada con importantes inversores que incluyen a Khosla Ventures, Bessemer Venture Partners, Data Collective, Promus Ventures, Lockheed Martin y K1W1.

Sobre Electron

Fabricado en Nueva Zelanda, Electron es un cohete hecho enteramente con un compuesto de carbono que utiliza los motores Rutherford propios de Rocket Lab e impresos en 3D para su sistema de propulsión principal. Electron es capaz de transportar cargas útiles, tales como pequeños satélites, a órbitas bajas. Gracias a su diseño moderno y construcción, se puede fabricar rápidamente y a escala con un alto grado de automatización.

Electron permitirá que los sistemas de pequeños satélites proporcionen servicios como conexiones económicas a internet desde el espacio, el monitoreo de la Tierra en directo para ofrecer servicios como el control medioambiental, predicción de desastres naturales, datos marítimos actualizados y servicios de búsqueda y rescate.

Electron puede entregar cargas útiles de hasta 150 kg en una órbita sincrónica solar de 500 km -el rango objetivo para el mercado de satélites constelación de alto crecimiento. Electron es el vehículo de lanzamiento de pequeños satélites más económico del mercado. Los clientes que han firmado para volar en Electron incluyen a la NASA, Planet, Spire y Moon Express.

Sobre el motor Rutherford

Rutherford es un motor de tecnología punta alimentado por oxígeno y keroseno específicamente diseñado desde cero para Electron en Nueva Zelanda, que utiliza un nuevo ciclo de propulsión. Su novedosa bomba propulsora eléctrica de alto rendimiento reduce la masa al reemplazar buena parte del hardware por software.

Rutherford es el primer motor de este tipo que utiliza la impresión en 3D para todos sus componentes principales. Estas características son únicas para un motor de combustible líquido con propulsores alimentados por turbobombas eléctricas. Su diseño centrado en criterios de producción posibilita la fabricación de los cohetes Electron, y consecuentemente, el lanzamiento de satélites a un ritmo sin precedentes.

Sobre el Complejo de Lanzamiento 1

El Complejo de Lanzamiento 1 de Rocket Lab, situado en la Península Mahia entre Napier y Gisborne en la costa Este de la Isla Norte de Nueva Zelanda, es el primer lugar de lanzamiento orbital en Nueva Zelanda, y el primero gestionado privadamente en el mundo.

La ubicación remota del Complejo de Lanzamiento 1, y en particular, el volumen bajo de tráfico marino y aéreo, es un factor decisivo a la hora de efectuar lanzamientos ilimitados al espacio. Su posición geográfica facilita el acceso a una gran variedad de acimuts orbitales posibilitando que los satélites lanzados desde Mahia puedan llegar a un amplio espectro de inclinaciones para proporcionar servicios en muchas zonas alrededor del mundo.