WASHINGTON, 24 Ene. (OTR/PRESS) -
Se conoció hoy la forma que tendrá la propuesta de inyección anunciada la semana pasada por el presidente norteamericano, George. W. Bush. Los ciudadanos de ese país recibirán devoluciones de entre 300 y 600 euros, en función de tratarse de solteros o parejas, y suplementos de otros 300 euros por cada hijo. Esta medida, tan inmediata como sea posible, afectará también a las empresas, que dispondrán de reducciones fiscales que potencien la inversión en equipamiento. Este anuncio destinado a la maltrecha economía estadounidense coincidió con otro, del Fondo Monetario Internacional, que aleja los peores presagios y señala que no se espera una recesión, sino un crecimiento por debajo del potencial.
La economía estadounidense no pasa por su mejor momento, dañada principalmente por la crisis hipotecaria, y por este motivo el propio Bush apostó el pasado viernes por un plan de inyección de liquidez en los bolsillos de los ciudadanos equivalente al 1% del PIB, o lo que es lo mismo, casi 100.000 millones de euros. Hoy, la Casa Blanca hizo oficial el acuerdo, que tendrá el coste porcentual del PIB contemplado por Bush en su discurso, y que anticipa la puesta en marcha de un plan que contempla devoluciones de impuestos a los ciudadanos y medidas fiscales para las empresas, que se beneficiarán de un tercio del presupuesto total.
Lo más llamativo es el plan contemplado para los particulares, que verán su bolsillo algo más lleno con devoluciones de 300 dólares (algo más de 200 euros) por persona con ingresos inferiores a 75.000 dólares anuales y 600 para parejas, siempre y cuando no superen un nivel de renta anual superior de 150.000 dólares. Además, se darán ayudas de 300 dólares por hijo, hasta un máximo de 1.200. Para quienes, por ingresos, no estén obligados a declarar sus impuestos, el plan establece un pago único de 300 euros.
En materia de empresas, el texto prevé deducciones destinadas a favorecer la inversión en equipamiento. Así, se favorecerán rebajas del 50% en este tipo de inversiones. Según informaciones del diario 'The Washington Post' recogidas por Otr/press, el pacto no incluye mejoras en los vales destinados a los más pobres para alimentación ni cualquier otra mejora encaminada a mejorar otros aspectos, como el seguro por desempleo.
"Diez millones de americanos tendrán un cheque en su correo", explicó la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, quien señaló como principales beneficiarios a la clase media. El dirigente republicano John Boehner indicó que la intención de las autoridades es poner en marcha el plan "tan pronto como sea posible".
NO HABRÁ RECESIÓN
El Fondo Monetario Internacional (FMI) contempla un horizonte esperanzador, o al menos no tan dramático. El organismo señaló que no se prevé una recesión en la economía estadounidense si no que, si acaso, el país entraría en un periodo de crecimiento económico "por debajo de su potencial".
El director de relaciones externas del FMI, Masood Ahmaed, afirmó hoy que el organismo no predice una redecisión económica en Estados Unidos, tal y como aseguró en rueda de prensa. En este sentido, como escenario "más probable", podría darse no un retroceso pero sí un freno, de tal forma que Estados Unidos entrase en un periodo de crecimiento económico "por debajo de su potencial", algo que ha había predicho el Fondo en sus previsiones de octubre.
Preguntado por las reformas fiscales anunciadas la semana pasada por el presidente estadounidense, George W. Bush, el portavoz del FMI subrayó que, para el organismo, este paquete debería ser "adecuado y específico" si realmente quiere lograr los efectos ansiados. La institución ha retrasado la actualización de sus previsiones económicas sobre el crecimiento global por la situación actual de los mercados financieros.
