COPENHAGUE, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo danés AP Moller-Maersk, propietario de Maersk Line, el mayor transportista marítimo de mercancías, registró pérdidas de 1.205 millones de dólares (983 millones de euros) en 2017, reduciendo así un 37,8% el resultado negativo de 2016, tras asumir un impacto negativo de entre 250 y 300 millones de dólares (204 y 245 millones de euros) relacionado con el ciberataque sufrido por la multinacional el pasado mes de junio.
"En junio, Maersk fue víctima de uno de los ciberataques más agresivos que jamás hemos experimentado. El efecto en la rentabilidad fue de entre 250 y 300 millones de dólares", indicó la empresa.
Los ingresos anuales de la danesa sumaron un total de 30.945 millones de dólares (25.242 millones de euros), un 13,5% más que un año antes, con un crecimiento del 17,3% del negocio de la naviera Maersk Line, pero un retroceso del 0,9% en la facturación de su filial de terminales portuarias.
"2017 ha sido un año de rápidos y considerables cambios para AP Moller-Maersk, a medida que hemos progresado en la ejecución de nuestra nueva estrategia", declaró Jim Hagemann, presidente de Maersk, quien destacó que el crecimiento futuro de la compañía estará basado sobre el "crecimiento orgánico" en el negocio de transporte y logística, junto a "adquisiciones seleccionadas".
