MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La digitalización está cambiando el día a día de todas las empresas, y uno de los departamentos que hasta ahora no se había visto demasiado afectado por este imparable proceso, como es de las direcciones financieras, se ha visto de repente invadido por millones de datos y por la inteligencia artificial.
En este contexto se ha desarrollado esta mañana en Madrid el foro "Claves de la transformación, impacto en las áreas funcionales de la empresa" organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y KPMG.
Bernardo Ruecker, socio de auditoría de KPMG, ha asegurado que "la frontera entre la función financiera y el negocio se está difuminando porque la primera es estratégica y no solo en la generación de información, sino también en su análisis".
Por su parte Ernesto López Mozo, director general económico-financiero de Ferrovial, puso el acento en que "las empresas cada vez vamos a destinar menos recursos a recopilar los datos y más a su análisis para apoyar a la toma de decisiones en el área de negocio que, además, puede ayudar a anticipar la gestión de riesgos. Cada vez más se confirma que los financieros necesitamos conocimientos estadísticos y también operativos".
Para Borja García-Alarcón, director general económico financiero de Enagás, la transformación es continua y un cambio evidente es que las herramientas tecnológicas permiten que el departamento financiero pueda realizar el control de la gestión antes de las operaciones de negocio frente al tradicional control posterior en la gestión de las operaciones.
Desde otro de los sectores fundamentales de actividad en España, como es el comercio, Antonio Arnanz, director financiero del Grupo Dia, considera que "la digitalización es una oportunidad, pero también una necesidad, ya que, en nuestro caso, nos da información casi inmediata de nuestros clientes y eso nos proporciona una ventaja competitiva a la hora de poder reaccionar con rapidez. Ahora el reto es transformar los datos en conocimiento y automatizarlos para poder tomar decisiones de manera rápida".
Los cuatro ponentes coincidieron en que la dirección financiera de las empresas tiene ante sí transformar la cantidad y calidad de los datos en conocimiento que, posteriormente, se debe integrar en la gestión para optimizar los objetivos, para lo que estos departamentos necesitan incorporar nuevos perfiles con nuevas habilidades y actitudes, o lo que es lo mismo, menos dedicados a la generación de información y más a su análisis.
